El Tribunal Oral Federal Nº 2 dispuso que Cristina Kirchner cumpla su condena en su domicilio y justificó la decisión por una serie de condiciones.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 2 resolvió que la expresidenta Cristina Kirchner cumpla en prisión domiciliaria la condena a seis años de cárcel que quedó firme a raíz del fallo de la Corte Suprema. La decisión responde a su edad y a razones vinculadas con su seguridad personal.
La medida fue adoptada tras considerar que Kirchner, de más de 70 años, fue víctima de un intento de homicidio en 2022 y que su encarcelamiento podría exponerla a situaciones que comprometerían su integridad física. El tribunal valoró que el encierro carcelario sería incompatible con los estándares legales vigentes.
El proyecto de ordenanza fue presentado por el bloque de Unión por la Patria en el Concejo Deliberante. También ingresó un repudio a la condena.
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El fallo fue firmado por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso. Allí se enfatizó que, si bien la ley habilita la prisión domiciliaria para personas mayores de 70 años, la decisión requiere de una evaluación judicial sobre la razonabilidad y las condiciones particulares del caso.
Los jueces destacaron que la prisión domiciliaria no es automática, sino que debe analizarse su procedencia a partir de principios humanitarios y del contexto personal de la persona condenada. Indicaron que "el juez de ejecución podrá disponer el cumplimiento de la pena en detención domiciliaria".
En esta línea, ponderó para los jueces "la combinación del riesgo para la vida e integridad física de la condenada a raíz del atentado del que fue víctima, junto con la dificultad de garantizar su seguridad en un establecimiento penitenciario sin incurrir en prácticas discordantes para el derecho constitucional y convencional -aislamiento-", por lo que deciden "en favor de la concesión de la prisión domiciliaria como única vía hoy compatible con el respeto de los derechos fundamentales de la persona y los fines resocializadores de la pena".
Desde la defensa, a cargo de los abogados Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, habían argumentado que su ingreso a una unidad penitenciaria resultaría incompatible con los estándares constitucionales por requerir un aislamiento permanente. El tribunal coincidió en que su seguridad no puede garantizarse sin medidas extremas.
La ex mandataria deberá permanecer en su domicilio en San José y Humberto Primo, en Constitución. Además, deberá presentar en 48 horas una nómina con su entorno cercano y evitar conductas que alteren la convivencia. El cumplimiento de las condiciones será supervisado por la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal.
Además de las restricciones que tiene la domiciliaria otorgada a Cristina Kirchner, como la entrega de un listado de familiares cercanos y la advertencia sobre "conductas que puedan perturbar la tranquilidad del vecindario y/o alterar la convivencia pacífica" con sus vecinos, también ordenaron la colocación de una tobillera electrónica.
La ex presidenta tendrá un dispositivo de vigilancia electrónico, y a pesar de que la defensa se opuso, la resolución judicial remarcó que "la regla es la instalación del dispositivo y su dispensa la excepción sometida a ciertas exigencias".
La tobillera será colocada por la Dirección de Asistencia a Personas Bajo Vigilancia Electrónica, que depende de la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios del Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich, y monitoreará la localización de la dos veces ex mandataria.
La resolución de este martes, a su vez, dejó sin efecto la citación para mañana. La notificación personal de la sentencia quedó en manos de la Comisaría de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires con jurisdicción en el domicilio de Cristina Kirchner.