El Gobierno difundió un borrador que redefine licencias, compensaciones, plataformas digitales y bancos de horas dentro de la reforma laboral.
La reforma laboral volvió al centro del debate tras la circulación de un nuevo borrador que detalla cambios en vacaciones, indemnizaciones, despidos y bancos de horas. El texto recupera ideas discutidas entre el oficialismo, el sector empresario y los gremios, que mantuvieron posiciones enfrentadas.
El documento comenzó a tomar forma dentro del Consejo de Mayo, donde funcionarios, empresas y sindicatos participaron del análisis preliminar. La salida de los representantes gremiales intensificó las diferencias y profundizó el rechazo al contenido que impulsa el Gobierno.
ANSES difundió un aviso para jubilados y pensionados con detalles sobre un trámite que puede facilitar gestiones y resolver cuestiones vinculadas al cobro.
El Presidente Javier Milei decretará sesiones extraordinarias para que traten las reformas y el Presupuesto 2026. Todo indica que comenzarán el 10 de diciembre.
El borrador fija lineamientos para actualizar regímenes especiales, procedimientos judiciales y derechos vinculados a licencias, días pagos y prestaciones sociales. También incorpora capítulos sobre la actividad digital, en especial para plataformas de reparto, según informó Infobae.
En materia de vacaciones, el texto reafirma el derecho a un período anual pago, con la opción de ampliar días por acuerdo individual o colectivo. La autoridad laboral podrá autorizar acumulaciones excepcionales y habilita el fraccionamiento del descanso según particularidades familiares o productivas.
El borrador también menciona los bancos de horas, habilitando esquemas flexibles para adaptar jornadas y compensaciones, siempre con respeto de los descansos obligatorios y límites previstos por la Ley de Contrato de Trabajo.
Las convenciones colectivas podrán pactar regímenes que organicen horas extras, francos compensatorios y bancos de horas para adecuar los tiempos de trabajo a la modalidad de cada actividad. Deberán respetar descansos mínimos de 12 horas entre jornadas y 35 horas semanales.
El texto aclara que la reducción de la jornada solo regirá si así lo establecen normas nacionales, contratos individuales o convenios colectivos. Las empresas deberán notificar por escrito la fecha de inicio de las vacaciones con 45 días de anticipación, salvo regímenes particulares acordados con representación sindical.
El documento agrega que los convenios podrán definir cálculos en base a promedios y autoriza usar bancos de horas para compensar excesos en un día con reducciones en otro, siempre sin superar el máximo semanal legal o el previsto para cada actividad. La propuesta busca ordenar criterios y reducir litigiosidad.
La reforma laboral incluye además reglas para acumulaciones excepcionales de días de descanso, que requerirán intervención de la autoridad de aplicación. Este mecanismo se aplicará ante situaciones justificadas y permitirá flexibilizar el uso del período vacacional según la demanda del sector.
El proyecto plantea que la indemnización clásica pueda sustituirse por fondos o seguros sectoriales de cese, definidos por negociación colectiva. Estos sistemas funcionarían con aportes mensuales del empleador para dar previsibilidad al cálculo y aliviar el impacto sobre pequeñas y medianas empresas.
La propuesta precisa que la base de cálculo incluirá salario básico, sumas habituales y antigüedad, mientras excluirá pagos extraordinarios, gratificaciones especiales y montos transitorios. También habilita la liquidación fraccionada en ciertos casos y limita intereses sobre capital indemnizatorio.
En los despidos sin causa, regirán las compensaciones tradicionales, mientras que para los despidos con causa el empleador deberá justificar la decisión y notificarla por vía electrónica. El trabajador podrá ejercer defensa y recurrir a instancias administrativas y judiciales según el procedimiento previsto.
La regulación reconoce la relación laboral entre empresas tecnológicas y repartidores, obligando a registrar a los trabajadores ante la seguridad social, realizar aportes y contratar seguros. También fija pautas sobre jornada, descanso y remuneraciones mínimas para quienes operan en plataformas.
El régimen incorpora derechos sindicales, participación en negociaciones colectivas y representación sectorial. Con esto, los trabajadores de plataformas quedan equiparados normativamente al resto de las actividades reguladas, un reclamo sostenido por organizaciones del sector.
La reforma laboral también detalla mecanismos de reincorporación por sentencia. Si un tribunal declara ilegítimo el despido, el trabajador podrá volver al puesto o cobrar la indemnización equivalente. En caso de retorno, la empresa deberá regularizar la relación y pagar salarios caídos durante todo el período.