El uso de la inteligencia artificial ya se instaló en las aulas, pero los docentes advierten una fuerte carencia de capacitación y lineamientos institucionales.
La irrupción de la inteligencia artificial en las escuelas argentinas desató un escenario de incertidumbre: los docentes reclaman capacitación urgente, mientras que los estudiantes ya la utilizan con frecuencia y sin un marco común que ordene su aplicación en las aulas.
Un informe elaborado por la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de Argentina (AIEPA) expuso el estado actual del tema. A partir de evaluaciones y encuestas, el relevamiento concluyó que existe entusiasmo y un uso creciente, pero también una fuerte ausencia de pautas claras que definan cómo avanzar.
Un informe nacional reveló que apenas el 10% de los estudiantes que comenzaron la primaria en 2013 finalizó la escuela secundaria en 2024 en tiempo y forma.
La Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) resolvió una medida de fuerza para los docentes de todo el país. Habrá una multitudinaria movilización.
"Este estudio confirma que estamos en una etapa inicial, en la que la innovación corre más rápido que la regulación interna. Los docentes y los estudiantes ya interactúan con estas herramientas en el aula, pero lo hacen sin un marco institucional común que brinde certezas", sostuvo el secretario ejecutivo de AIEPA, Martín Zurita.
El trabajo se realizó sobre 148 institutos privados de distintas ciudades bonaerenses y del resto del país. Apenas dos de cada diez escuelas afirmaron contar con protocolos definidos para el uso de IA por parte de los alumnos, mientras que la mayoría admitió que está "trabajando en eso" o que directamente no comenzó a evaluarlo.
La falta de reglas choca con otro fenómeno: más de la mitad de los directivos y docentes percibió que los estudiantes ya emplean inteligencia artificial con frecuencia para realizar tareas. Otro 24% aseguró verlo de manera ocasional, lo que confirma que la tecnología ya se instaló en la dinámica escolar.
La mirada de los educadores aparece dividida. Un 65% describió la postura general del plantel como "mixta", con expectativa y dudas a la vez. Apenas un 7,5% habló de una posición mayoritariamente positiva, mientras que un 10% definió la actitud como negativa.
El punto más contundente del relevamiento se dio al consultar sobre la preparación docente: el 77,5% reclamó instancias de formación urgentes y obligatorias en IA aplicada a la educación, mientras que otro 20% pidió capacitaciones optativas. Apenas un 2,5% consideró suficientes los recursos disponibles.
En la experiencia individual, seis de cada diez docentes reconocieron no haber recibido formación específica en el tema, aunque manifestaron interés en hacerlo. Entre quienes sí se capacitaron, predominaron los cursos externos y webinars, frente a las actividades organizadas por las propias instituciones educativas.
El relevamiento también mostró que un 68% de los docentes ya utiliza alguna herramienta de inteligencia artificial en su práctica. Sin embargo, la mayoría lo hace de manera ocasional o exploratoria. Solo un 19% afirmó usarla en forma habitual, mientras que un 11% aseguró no tener interés en incorporarla.
Las diferencias de roles quedaron a la vista. Los directivos admitieron un uso más frecuente de la IA en su propia práctica y una mayor percepción de que los alumnos la utilizan. Los docentes, en cambio, la emplean de manera esporádica y se muestran más reticentes a avanzar en protocolos.
"La inteligencia artificial no puede quedar librada al azar ni al uso individual, porque su impacto trasciende lo pedagógico e involucra también cuestiones éticas y sociales. Desde AIEPA creemos que la formación docente es el primer paso para transformar la incertidumbre en una oportunidad", concluyó Zurita.
El secretario ejecutivo de AIEPA remarcó que "el relevamiento dejó un mensaje claro: sin protocolos definidos y con una demanda contundente de capacitación, la IA se convirtió en un factor disruptivo que obliga a repensar la enseñanza". Y completó: "Ya la pregunta no es si se usará inteligencia artificial, sino cómo y bajo qué reglas".