La comunidad de La Plata lamenta el fallecimiento de Gustavo Zampe, referente del folklore bonaerense que dejó una huella en la música popular argentina.
A los 34 años falleció el músico Gustavo Zampe, reconocido compositor e intérprete del folklore bonaerense. Nacido en Roque Pérez, vivía en La Plata desde 2011, donde desarrolló su carrera artística y formó parte de distintos proyectos musicales ligados a la facultad de Artes de la UNLP.
Su muerte causó conmoción en el ambiente peñero. En pocas semanas, una enfermedad inesperada apagó su voz, pero su legado sigue vivo en quienes lo escucharon. Su paso por La Plata, Roque Pérez y los escenarios nacionales deja una huella imborrable para la música argentina.
La sala de grabación será para artistas locales y está ubicada dentro del Centro Cultural Pasaje Dardo Rocha de La Plata, en 49 entre 6 y 7.
La Municipalidad de La Plata le dio al Club Albatros el uso precario de una calle interna a la altura de 514 y 137. También desafectó la calle 26, de 86 a 90.
Desde los 12 años, cuando empezó a estudiar guitarra y canto, hasta convertirse en una de las voces más auténticas de la nueva generación del folklore bonaerense, Gustavo fue siempre fiel a sí mismo, y sus seres queridos lo recuerdan como "un artista de raíz, un soñador con los pies en la tierra, un trabajador de la música que amó profundamente lo que hacía".
En 2017 se unió al grupo Los Chaza, con quienes recorrió escenarios de todo el país. Su tema Donde mis sueños se encuentran fue elegido por la banda para dar nombre a un disco editado en 2020. Su talento y compromiso lo convirtieron en una figura destacada de la nueva generación del folklore argentino.
Su primer álbum solista, Convergencia, salió en 2020 e incluyó nueve canciones propias. Con ese trabajo, Zampe consolidó su estilo personal y su mirada poética sobre la música popular. A lo largo de su carrera, combinó técnica y sensibilidad para acercar el folklore a nuevas audiencias.
Pese a su agenda cargada, el artista nunca dejó de volver a Roque Pérez. Cada visita era motivo de reencuentro con su gente, como aquella recordada presentación en la Fiesta de la Carne de Cerdo, donde compartió escenario y alegría con su público.
Toda la comunidad platense y del folklore bonaerense lo despidió en redes y expresaron que "su música, su calidez humana y su huella artística quedarán para siempre en la memoria colectiva" de todos los que alguna vez lo escucharon.