Un proyecto de "beneplácito" por el nuevo sistema de votación expuso las diferencias entre UxP y la oposición, y también cruzó a radicales y libertarios.
El Concejo Deliberante de La Plata volvió a sesionar este jueves y, aunque no se aprobaron ordenanzas de importancia, hubo un fuerte debate en torno al uso de la Boleta Única de Papel que aprobó la semana pasada el Senado nacional y aguarda ahora la convalidación de Diputados para convertirse en ley.
El nuevo sistema de votación, que entraría en vigencia en 2025, expuso una vez más la grieta política entre el peronismo y la oposición. El proyecto que trajo el debate al recinto fue un "beneplácito" presentado por la concejala bullrichista PRO - Libertad, María Belén Muñoz, para manifestar el acuerdo del Concejo tanto con lo aprobado en el Congreso y las iniciativas que están en el Legislatura bonaerense y que buscan modificar la forma en que se vota en la Argentina, pasando de la tradicional lista sábana con múltiples cuerpos que imprime cada partido político, a una sola boleta en la que el elector marca con una cruz el candidato en cada categoría. La BUP ya se aplica en las provincias de Córdoba, Santa Fe, Salta y Mendoza.
La iniciativa para implementar la Boleta Única tiene media sanción en Diputados y el Gobierno intentará convertirla en ley en el segundo semestre del año.
"Manifestando el beneplácito del Cuerpo a las iniciativas legislativas que se encuentran actualmente en estudio tanto en las cámaras nacionales como en la legislatura provincial, para la implementación en nuestro sistema electoral del Sistema de Boleta Única de Sufragio, tendientes a avanzar con los procesos de transparencia y lucha contra el fraude electoral", señala el proyecto que este jueves se puso en consideración en el recinto.
El proyecto fue tratado sobre tablas y se rechazó. En el momento de la votación seis ediles estaban ausentes -Cristian Vander y Gisela Didio de UxP, los libertarios Guillermo Bardón y Florencia Defeo, y Lucas Lascours y Florencia Barcia del PRO- por lo que la oposición no logró los dos tercios necesarios en estos casos. Muñoz pidió una moción de reconsideración del voto, ya que buscaba que se votara de manera nominal, pero tampoco logró reunir las manos.
La negativa abrió el debate y expuso los argumentos a un lado y otro de la grieta: tanto el PRO, como la UCR, el PRO Libertad y Buenos Aires Libre se mostraron a favor del proyecto mientras que Unión por la Patria rechazó la BUP en la misma línea en que ya lo hicieron los legisladores nacionales y el gobernador Axel Kicillof. Pero además disparó chicanas entre la misma oposición ya que los radicales aseguraron que el propio presidente Javier Milei "usó partidos fantasma" para ganar las elecciones en 2023.
Muñoz, la autora del proyecto, se mostró muy molesta por el rechazo y criticó duramente al alakismo. "Parece que la falta de transparencia es la bandera más grande que levanta el kirchnerismo", disparó y recordó que con el sistema actual cada partido debe imprimir cinco boletas por cada elector. "¿Tienen idea del gasto público que significa, de la contaminación y de la corrupción que eso genera?", preguntó.
Aseguró que muchos partidos presentan listas sólo para poder tener el financiamiento que la ley actual otorga. "Es guita que va a financiar a los partidos políticos. Se tienen que acabar los curros en el país", lanzó y volvió a apuntarle al oficialismo: "No subestimen al electorado porque ya demostró que vota lo que quiere igual".
En la misma línea, el concejal Nicolás Morzone del PRO los acusó de beneficiarse del sistema de boleta tradicional. "No me extraña del kirchnerismo porque atrasa. Solo 16 países en el mundo no tienen boleta única de papel. Solo acá se sostiene este modelo arcaico que beneficia a caudillos electorales. Es un gasto innecesario", dijo y remarcó: "Me parece una locura remota no haber aprobado este proyecto".
El presidente del bloque radical, Diego Rovella, intervino para hablar del "financiamiento" político y pidió no meter a todos en la misma bolsa, al tiempo que chicaneó a los libertarios. "Aclaremos que hablamos de los vivos que montan esos partidos políticos fantasma que viven del financiamiento político como los que le permitieron a Javier Milei llegar a la presidencia", señaló escueto y encendió la mecha.
El concejal de Buenos Aires Libre, Guillermo Bardón, no se quedó callado y acusó a los radicales de "mimetizarse" con los peronistas. "Decir que Milei ganó por partidos fantasmas es subestimar a los 15 millones de argentinos que lo votaron. Es entrar en la misma lógica que el kirchnerismo. A veces están tan cercanos que se mimetizan", le devolvió.
Más allá del cruce, el libertario puso el foco en el ahorro para el Estado y aseguró que con la BUP podrían ahorrarse cincuenta millones de dólares en la provincia de Buenos Aires. Y aseguró que el gobierno de Kicillof no quiere cambiar el sistema "porque saben que pueden perder" en 2025.
Por Unión por la Patria habló Cintia Mansilla, quien remarcó que pese a todas las críticas que hace la oposición al sistema tradicional "no hubo ninguna denuncia de fraude" en todos estos años ni en provincia ni en Nación. "Kicillof ganó por 20 puntos de diferencia y no hubo ninguna presentación de otros partidos políticos", graficó.
Su compañero de boque, Juan Granillo Fernández, en tanto, consideró que "es una discusión válida" pero habló de lo poco práctica que sería la boleta única de papel en la Provincia ya que, por la amplia oferta electoral, "debería tener 1,48 cm por 10 cm" para contener a todos los candidatos en cada categoría.
Además del contrapunto por la BUP, los concejales también se cruzaron por la suba del 20% en la tasa de Servicios Urbanos Municipales (SUM) dispuesto por la Agencia Platense de Recaudación y por el veto que anunció Milei a la ley de Financiamiento Universitario.
En el primer caso, la concejala del PRO, Lucía Barbier, pidió que el Ejecutivo dé marcha atras con la suba de tasas y anule el incremento por considerar que la decisión es "inconstitucional" porque debió pasar por el Concejo pero que, además, castiga el bolsillo de los platenses. Desde el oficialismo, Granillo Fernández aseguró que la APR quedó habilitada a disponer los incrementos por las ordenanzas fiscales e impositiva vigentes y sostuvo que "no existe un fundamento legal que habilite al Concejo a anular una suba dispuesta por el Ejecutivo".
El otro tema que generó momentos de tensión fue elproyecto presentado por la concejala de la UCR + PRO, Melany Horomadiuk, expresando la "preocupación" del Cuerpo "ante el veto anunciado por el Poder Ejecutivo Nacional a la Ley de Financiamiento de Universidades Nacionales". Aunque en la reunión de Labor se había decidido enviarlo a la comisión de Cultura para su tratamiento, la edil pidió tratarlo sobre tablas y eso generó el enojo de los presidentes del resto de los bloques opositores.
Tanto el titular del bloque del PRO, Juan Martínez Garmendia, como el libertario Bardón argumentaron que la decisión de la edil estaa echando por tierra el trabajo realizado hacía apenas un rato en Labor y aclararon también que el proyecto había sido ingresado fuera de término. "Entonces no hagamos más Labor", disparó Bardón apenas unos minutos antes de levantarse de su banca junto a su par de bloque, Florencia Defeo. Lo mismo hicieron todos los concejales del PRO, quienes abandonaron el recinto y la sesión estuvo a nada de quedarse sin quórum. "Entiendo que se fueron todos porque a nadie le importa la declaracion de emergencia de la UNLP ni la situación de las universidades", los chicaneó Horomadiuk a sus pares que abandonaron el lugar.
Granillo Fernández pidió pasar a un cuarto intermedio para apaciguar los ánimos. Tras unos minutos todos volvieron al recinto y se retomó la sesión. Entonces Rovella, en su calidad de presidente del bloque que integra Horomadiuk, pidió las disculpas del caso. "Quiero pedirles disculpas a los presidentes por no mantener la palabra. La importancia de los temas y el fervor de la juventud hace que a veces pasen estas cosas", explicó y volvió a pedir disculpas una vez más.