El cuerpo técnico de Gimnasia planifica su visita a Independiente, y Marcelo Méndez recuperó a un pulmón del mediocampo pensando en la creación de juego.
Hace dos semanas Gimnasia se entrena casi sin descanso en Estancia Chica con el objetivo de volver a la victoria fuera de casa pero para ello depende de lo que hagan los nombres que disponga Marcelo Méndez en cancha tras un receso donde varios futbolistas aprovecharon para recuperarse de sobrecargas o lesiones.
Uno de ellos fue Pablo de Blasis, quien recién esta semana se incorporó a la par del grupo luego de pasar varios días en kinesiología por el desgaste físico de los últimos partidos que lo llevó a estar muy cargado y debido a esto fue seguido de cerca por el cuerpo médico.
Con tan solo 6 años, es uno de los goleadores de las divisiones infantiles de La Plata. Los clubes de la región lo quisieron, pero eligió a Gimnasia.
Esto fue una buena noticia para Méndez, que durante la semana probó fútbol con Augusto Max en el medio y ahora saldrá para dejarle su lugar a De Blasis, un futbolista con mayor generación de juego y creatividad en ofensiva.
Para jugador de corte estará Martín Fernández, quien regresa de su sanción tras alcanzar la quinta amarilla, mientras que Max será el principal reemplazo para el mediocampo mientras que Nicolás Garayalde lo verá desde un palco al haberse ido expulsado ante Newell's.
La duda para Méndez pasa por la posible inclusión de Norberto Briasco, futbolista que participó un poco de la práctica formal de esta semana pero que aún no lo convence al DT por su estado físico, imponiéndose la figura de Santino Primante para debutar como titular con la casaca del mens sana.
Por su parte, Leonardo Morales, quien tampoco pudo ser parte de las prácticas la semana anterior, se reincorporó estos días y podrá ser tenido en cuenta por el uruguayo para ir desde el arranque.