Estudiantes volvió al ruedo en busca de la clasificación en la Copa Libertadores y el Torneo Apertura, en medio de diez días de una intensa logística.
Con el pase a los octavos de final en la mano y el duelo ante Rosario Central en el horizonte, Estudiantesempezó a pensar en lo que viene, con la continuidad en la Copa Libertadores como objetivo y tres viajes que pueden marcar un antes y después para el equipo de Eduardo Domínguez.
El momento futbolístico del Pincha atraviesa por un camino vertiginoso, con resultados malos y rendimientos que no terminan de convencer. En ese contexto, se encuentra en etapas decisivas en el plano local mientras busca la clasificación en el Grupo A de la Libertadores. Asimismo, volver a llegar a jugar el último partido en el ámbito local siempre tienta y para eso el cuerpo técnico busca equilibrar fuerzas para no dejar de lado ningún frente, como le sucedió en el 2024.
Estudiantes vuelve a estar en instancias decisivas en la Copa de la Liga y Eduardo Domínguez no quiere tropezar con la misma piedra que en Copa Libertadores.
Estudiantes jugará con Rosario Central por los octavos de final del Torneo Apertura y tiene la dura tarea de no prestarle atención al adverso historial.
Uno de los temas que debió resolver el departamento de fútbol junto con el encargado de la logística, es el de ensamblar las tres visitas que tiene por delante en los próximos diez días. Esto tiene que ver con que, el miércoles 7 y 14 de mayo tiene que viajar a Chile y Brasil, mientras que el compromiso ante Rosario Central será en condición de visitante.
En este sentido, vale recordar que tendrá entre partido y partido un promedio de dos días sin contar el viaje respectivo. Para tener en cuenta, la delegación partirá este martes a la tarde a Santiago de Chile y una vez finalizado el partido, volverá al país en horas de la madrugada y entrenará el jueves nuevamente.
Asimismo, en caso de confirmarse el duelo con el Canalla el sábado, el viaje está programado para el viernes a la tarde noche, con el regreso al finalizar el encuentro.
Por último y el viaje más largo y seguramente más incomodo será a Río de Janeiro para visitar a Botafogo por la fecha 5 de la Libertadores. El mismo está estipulado para el martes, haciendo noche allí y retornando al Club en horas de la madrugada del jueves, en caso de jugar los cuartos de final del torneo el fin de semana del 17 de mayo.