Sigue el dolor por el crimen de Umma Aguilera (9) durante un intento de robo en Lomas de Zamora y con el paso de las horas se supo la vida que llevaba y las ganas de vivir que tenía. La menor estaba en cuarto grado del Instituto Mario Madeddu, jugaba al handball y practicaba artes marciales.
Desde todos los ámbitos a los que ella concurría la despidieron con enorme tristeza y con un pedido latente de justicia. La menor entrenaba Handball los martes, miércoles y jueves en la miniescuela del Club Defensores de Banfield, así como también practicaba artes marciales.
Aunque estaba de vacaciones de verano, estudiaba en cuarto grado del Instituto Mario Madeddu ubicado en la calle Luis Siciliano 1751, Villa Centenario.
En la mañana en la que ocurrió el crimen Uma estaba en el auto con sus dos papá para ir al médico. Aun así, mientras se cerraba el portón de la casa una banda de delincuentes los sorprendió y dispararon en dos oportunidades sobre el vehículo. Uno de los tiros le ingresó en la nuca.
Mientras el profundo dolor por su asesinato no cesa, donde una vez más se refuerza el pedido de seguridad en el Conurbano, las entidades donde ella entrenaba y estudiaba la despidieron.
"Lamentamos la profunda pérdida de nuestra hermosa y pequeña Uma Aguilera Rodríguez, alumna de cuarto grado", expresó la escuela a donde asistía la víctima. El club confirmó que este martes permanecerá cerrado: "Acompañamos a la familia de handball en este triste momento", expresaron.
Desde la prensa de la PFA también mandaron un mensaje de condolencias: "Desde lo más profundo del corazón enviamos nuestras más sentidas condolencias y acompañamiento a sus padres, amigos camaradas y amiguitos de la menor".