La institución funciona en el patio de la Escuela 22 de La Plata. Los chicos tienen clases en contenedores metálicos y los robos agravan su situación.
El Jardín Nº 912 de La Plata, que funciona en conteneiners, fue blanco de robos en dos noches consecutivas y la comunidad educativa expresó su preocupación por el impacto que tienen los hechos de inseguridad en el funcionamiento diario. Señalan que los elementos robados son indispensables y agravan un escenario que es complejo de por sí.
El Jardín funciona de manera provisoria en contenedores dentro del patio de la escuela 22, en Altos de San Lorenzo, en 76 entre 23 y 24. El predio original del establecimiento, ubicado en 77 entre 131 y 132, está a medio terminar desde hace tres años.
El hecho de inseguridad ocurrió en un comercio de alimentos para mascotas de La Plata. Los ladrones destruyeron gran parte de la estructura del local.
La Policía detuvo en la Zona Roja de La Plata a una trabajadora sexual de 45 años que era buscada por apuñalar a un hombre y generarle graves heridas.
Los robos han sido moneda corriente en el último tiempo. Las familias reclaman para que finalicen la obra del edificio donde debería funcionar. Según denunciaron, entre el miércoles y el jueves, los ladrones se llevaron containers, anafes, pavas eléctricas y material de los chicos, además de provocar daños en puertas e instalaciones. “Intentaron llevarse los aires de dos salas y se llevaron parte de la instalación”, explicó Brenda, la madre de un alumno.
La mujer señaló que los grupos dependen del funcionamiento del aire acondicionado porque, al tratarse de conteiners metálicos, las temperaturas internas son muy altas. “No pueden tener clases sin los aires, porque en los contenedores se cocinan”, sostuvo.
La comunidad educativa insistió en que los chicos necesitan “un jardín digno” y recordó que incluso elementos básicos, como la sombra en el patio, son improvisados. Contaron que volvieron a usar telas rotas del año pasado para cubrir parte del espacio al aire libre mientras esperan avances en la obra del edificio.
"No queremos que nuestros hijos sigan sufriendo robos de sus juguetes, sus cosas, el baño lo tienen afuera, en el patio no hay sombra", denunció Brenda.