Se cree que simularon un procedimiento policial en Melchor Romero para ejecutar un golpe millonario. Detalles exclusivos que surgen del caso.
El pedido de prisión preventiva que recayó sobre los seis policías detenidos en La Plata en el marco de un insólito y preocupante episodio de presunta corrupción policial que sacudió a la comunidad paraguaya de Melchor Romero, donde uniformados de la seccional Tercera de Los Hornos habrían ejecutado un falso allanamiento para cometer un robo, prosperó.
El juez de Garantías Guillermo Atencio hizo lugar al pedido de la fiscal María Eugenia Di Lorenzo y dispuso el encierro preventivo, al menos hasta la etapa de juicio oral.
El episodio ocurrió en una vivienda del barrio San Carlos. Actuaron tres ladrones que huyeron con distintas pertenencias.
Dos falsos policías ejecutaron un golpe en un histórico local de La Plata, cuyo dueño fue peluquero de Néstor y Cristina Kirchner.
La lista de acusados está integrada por el comisario Miguel Del Valle González, Juan Alejandro Osuna, María José Barrera, Patricia Esther Campo, Daiana Belén Maidana y Ariel Nahuel Ortega Jurado. Del Valle González era el extitular de esa dependencia y el resto su grupo de tareas de calle.
Según se informó, los efectivos implicados entraron a los tiros y sin orden judicial, y trasladaron a la comisaría a 10 hombres de nacionalidad paraguaya, privándolos de la libertad.
El hecho, que se produjo tras un llamado al 911, llevó a que el grupo de policías se presentara en un lugar, donde un grupo de personas estaba jugando y apostando al piki voley, un deporte característico de la comunidad paraguaya que se juega con los pies y la cabeza.
En lugar de actuar conforme a la ley, los agentes decidieron aprovechar la situación para llevar a cabo un operativo irregular. Durante el procedimiento, que duró aproximadamente tres horas, incautaron varios objetos, incluyendo celulares y vehículos, algunos con numeración de chasis o motor limada.
Lo más alarmante del caso es el hallazgo de una considerable suma de dinero: $6.000.000, US$6.700 y 3.000.000 de guaraníes. Los policías, que no contaban con una orden judicial que justificara su intervención, decidieron llevar a todas las personas detenidas e incautar el dinero.
La situación dio un giro cuando apareció un video grabado por uno de los presentes en 526bis entre 177 y 178, que se encontraba tirado en el piso durante el operativo, el cual comenzó a circular en las redes sociales.
Las imágenes muestran a los policías actuando de manera sospechosa, lo que llevó a la fiscal Eugenia Di Lorenzo a tomar cartas en el asunto. Tras revisar las pruebas, solicitó la detención de seis policías, medida que fue avalada desde el juzgado de Garantías en turno.
Los policías enfrentan cargos en la justicia por “robo calificado por el uso de armas de fuego, por ser cometido en poblado y banda y por ser ejecutado por miembros de las fuerzas policiales, en concurso real con allanamiento ilegal, falsificación ideológica de instrumento público, falso testimonio, privación ilegal de la libertad agravada y abuso de autoridad”, se detalla en la documentación judicial.