La contadora platense detenida por liderar una red de facturación falsa que perjudicó al Estado en $4 mil millones es madre de un jugador de Gimnasia.
Sigue el escándalo en La Plata luego de que una contadora fuera detenida en las últimas horas, acusada de liderar una organización dedicada a emitir facturas apócrifas para facilitar la evasión de tributos nacionales como el IVA y el Impuesto a las Ganancias. La maniobra provocó un perjuicio fiscal estimado en más de $4 mil millones.
La investigación comenzó tras una denuncia presentada por la Dirección General Impositiva (DGI) en mayo de 2024 y fue desarrollada por el Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) junto con Gendarmería Nacional Argentina (GNA). Según los investigadores, la red funcionaba desde 2020 y estaba vinculada con más de 100 empresas, muchas del rubro de la construcción y obra pública.
La contadora, oriunda de La Plata, fue detenida tras una investigación que reveló facturas truchas vinculadas a empresas constructoras y obra pública.
La acusada, identificada como Natalia Foresio (48), será indagada en las próximas horas junto a otros implicados. Se le atribuye el rol de jefa de una asociación ilícita fiscal, además de presuntas maniobras de lavado de activos e intermediación financiera no autorizada.
De acuerdo a información a la que accedió 0221.com.ar, Foresio es la madre de Juan Cruz Cortazzo, defensor central categoría 2005 de Gimnasia. El joven debutó en primera a mediados de 2024 y firmó contrato profesional hasta 2027. Actualmente es titular en la Reserva.
Durante los procedimientos ordenados por el Juzgado Federal N° 3 de La Plata, a cargo de Ernesto Kreplak, se incautó una importante suma de dinero en efectivo, que incluye $186,9 millones, USD 348 mil, euros, libras esterlinas, reales y un millón de pesos uruguayos. Parte de esos fondos fue encontrada en una propiedad ligada a una firma investigada por actividades fuera de la ley.
Según datos oficiales, Foresio habría comenzado a operar en el sector de la construcción en 2018, cuando fundó una sociedad de responsabilidad limitada con su pareja. Desde entonces, se habría dedicado a montar un circuito que permitía a empresas simular gastos para reducir sus obligaciones fiscales mediante facturas truchas.
En la causa también figuran empresarios de la obra pública sospechados de inflar presupuestos en licitaciones usando estas maniobras, lo que podría implicar un caso de defraudación al Estado. La red tenía presencia en ciudades como Mar del Plata, Trelew, Esquel, Rawson, Córdoba y CABA, y no se descarta que existan más involucrados.