Un pedido de prisión perpetua recayó sobre Lucas Agüeda acusado de ser el autor material del crimen de Angélica Olmo, que fue descubierto el 3 de diciembre de 2016 en la vivienda que la víctima habitaba en calle 22 entre 526 y 526 de la localidad platense de Tolosa. El acusado y la mujer se conocían, ella lo ayudaba con dinero y a cambio él hacía realizaba trabajos a cambio. Según la autopsia el o los agresores la golpearon en la cabeza y le provocaron varias heridas cortantes, pero una profunda lesión con arma blanca en el cuello fue la que selló su deceso.
La solicitud de condena fue impulsada por el fiscal de juicio Jorge Paolini en base a un informe de llamados telefónicos entre el acusado y la víctima, que por entonces tenía 79 años.
El letrado también ponderó una fuerte deuda de dinero para esa época que Agüeda había contraído con la jubilada y el testimonio de una testigo de identidad reservada que dijo haberlo escuchado lanzar una dura frase: "Vamos a hacer cagar a la vieja, yo sé dónde está la plata".
El acusado declaró durante el debate, expuso que el día del crimen sufrió un accidente en moto y reconoció que llamó por teléfono a la víctima para pedirle ayuda monetaria con el objetivo de cargar la tarjeta SUBE. Paolini sin embargo señaló que su relato fue inconsistente y que no supo dar una respuesta clara sobre varios puntos consultados, como unos llamados telefónicos que recibió de su vecina en un horario crítico para la versión aportada por Agüeda.
Para el fiscal se trata de un caso de homicidio criminis causa en concurso real con robo simple, ya que dio por probado que del lugar se robaron un televisor “gigante” y solicitó que se aplique la máxima condena. Como agravantes de la pena mencionó la “violencia desplegada, la cantidad de puñaladas que le causó mayor dolor (a la víctima), la violación de la confianza de la víctima ya que mató a alguien que lo ayudaba”.
“CONCLUSIONES ERRÓNEAS”
A su turno la defensora oficial Ana Julia Cova rechazó el pedido de condena al sostener y explicar que “las conclusiones del fiscal son erróneas basadas en antojadizas conjeturas”. Para la funcionaria “no se probó la participación del acusado en este hecho”. “El fiscal acude a conjeturas porque la investigación fue defectuosa, tendenciosa y prejuiciosa”, consideró la representante de la defensa oficial y marcó lo que para ella fueron irregularidades en la pesquisa: “¿Cuántos fueron los autores, qué rol le cupo a cada uno, cómo fue la secuencia? Concluido el debate hay más dudas que certezas y esas dudas no se van a despejar”, subrayó para luego recordar que en esta causa hay otras personas que fueron imputadas y la investigación sobre esos sospechosos no avanzó.
La defensa también señaló que hubo llamados telefónicas al y desde los teléfonos de la mujer asesinada que no fueron investigados y solicitó un veredicto absolutorio.
Luego, tras sostener en reiteradas oportunidades la presunta orfandad probatoria de la acusación, realizó un planteo subsidiario, en caso de condena requirió que sea por el delito de “homicidio simple en concurso real con robo” y que se valoren como atenuantes de la pena “el buen concepto del acusado y la extensión de proceso”. Agüeda lleva casi siete años en prisión preventiva. Fue detenido en 15 de diciembre de 2016.
Tras los alegatos los jueces le dieron la última palabra al juzgado y este señaló: “Soy inocente, nunca estuve en esa casa, que se aclare que soy inocente, no maté a nadie, no soy un asesino”.
La lectura de la parte dispositiva de veredicto será el lunes 3 de julio en horas del mediodía según dispusieron los jueces Ramiro Fernández Lorenzo, Cecilia Sanucci y Hernán Decastelli del Tribunal Oral Criminal I de La Plata.