El nivel de aceptación electoral del Frente de Todos en La Plata se derrumbó un 27,8% en los dos años que separan las elecciones a intendente de 2019 que por ese sector encabezó Florencia Saintout y la que protagonizó este año la diputada nacional electa Victoria Tolosa Paz. Los números del escrutinio definitivo que trascendieron en las últimas horas son seguidos de cerca en la interna del peronismo local y se colocan bajo el prisma de la carrera hacia 2023, cuando deba definirse qué nombre de la oposición intentará gobernar la ciudad.
En las generales de aquel año, Saintout obtuvo 182.507 votos contra los 131.688 que obtuvo la lista de diputados nacionales de Tolosa Paz. La sangría de algo más de 50.000 votos votos se extiende a la de concejales y legisladores provinciales, que este año sumaron 131.802 y 131.860 votos respectivamente, sin contar los extranjeros que suman alrededor de 9.000 y votan solo en las categorías locales y provinciales.
Pese a que con el resultado del domingo el Frente de Todos (FdT) logró quedarse con tres de las seis diputaciones en juego y sumar una a las dos que ponía en juego en La Plata, en el peronismo preocupa una pérdida que complejiza la organización de la principal oposición para hacerle frente al poderío de Julio Garro. Se evalúa que la concejala de licencia no logró ser profeta en su tierra, cautivar al electorado platense y arrastrar como cabeza de lista nacional a los armados locales, que perdieron en la aventura casi seis puntos respecto de 2019: en aquel momento, sacaron el 40% y ahora cayeron al 34,5%.
Los números configuran un escenario de cara a 2023 preocupante para la diputada electa: como competidora natural en esa carrera, Saintout no expuso su nombre en este turno electoral y suena como posible incorporación al gabinete de Axel Kicillof después del 10 de diciembre.
La incapacidad de sumar voluntades impactó en la baja participación del electorado que pudo haber afectado las chances del Frente de Todos. Es un dato objetivo que la cita electoral del 14 de noviembre pasado participaron alrededor de 60.000 electores platense menos que en 2019. Pero también lo es que esa definición que relativiza los análisis comparativos respecto de los sufragios conseguidos por el peronismo en 2019 y 2021 también puede terminar saldando negativamente en la mirada sobre la performance electoral de Tolosa Paz, quien no logró perforar el techo que le impuso la apatía y el malestar con el oficialismo nacional y provincial. No faltan lecturas que consideran que la mayoría de quienes no concurrieron a votar ahora fueron votantes de Alberto Fernández, Axel Kicillof y Florencia Saintout en 2019 y que la lista que compitió ahora no logró seducir.
Más allá de la pérdida de votos que padecieron Tolosa Paz y las listas encabezadas por Luis Arias y Ariel Archanco (a concejal y diputado provincial), el escrutinio definitivo marca también la inexistencia del corte de boleta. Sin contar las mesas de extranjeros que solo votaron concejales y diputados provinciales, las diferencias fueron mínimas. La lista de legisladores nacionales que encabezó Tolosa Paz sacó 131.688 votos, la que encabezó Archanco 131.860 y la ediles de Arias 131.808. La escena es compleja para el peronismo platense que no encuentra los caminos ordenadores y profundiza la fragmentación.
La pelea interna seguramente comenzará a intensificarse el año que viene y tendrá como próximo botín la conducción del PJ platense. Mucho dependerá del rol que juegue la diputada electa en el bloque del Frente de Todos que conduce Máximo Kirchner en el Congreso de la Nación. Pero también lo que pueda resultar del futuro inmediato de Saintout, quien la semana que viene vence su mandato como legisladora. El nombre de la exdecana de la facultad de Periodismo y Comunicación Social suena con fuerza para desembarcar en el gabinete provincial al frente de un nuevo ministerio de Cultura. Esa designación contaría con el apoyo del Gobernador y del propio líder de La Cámpora, quien avaló su candidatura a intendenta en las PASO contra Tolosa Paz de 2019.
Mucho dependerá de lo que ocurra con el intendente Garro, hoy impedido de reelección por ley (algo que podría destrabarse si hay una decisión política en ese sentido). Si el Jefe Comunal no es de la partida, podría ser una oportunidad para el Frente de Todos. El peronismo no quiere dejar esa chance sin contar con el nombre más atractivo posible para enfrentar a un oficialista que no sea el "as de espadas".