La Asociación de Madres de Plaza de Mayo está de luto tras el fallecimiento en La Plata de Carlos Ramírez Abella, el abogado y militante que dedicó su vida a la causa que vivió en carne propia durante la última dictadura cívico-militar.
La Asociación de Madres de Plaza de Mayo está de luto tras el fallecimiento en La Plata de Carlos Ramírez Abella, el abogado y militante que dedicó su vida a la causa que vivió en carne propia durante la última dictadura cívico-militar.
El jurista tenía 95 años y es considerado por las Madres de Plaza de Mayo como "el padre más padre de todos". Casado con Haydee Pérez, tuvo tres hijos y, en solo ocho meses, su familia fue diezmada: desaparecieron seis de sus miembros. Su hija con su marido, y dos sobrinas con sus respectivos matrimonios. En todos los casos, los secuestradores se llevaron a los pequeños hijos de las parejas, y Carlos y su esposa, se encargaron de recuperar a todos los bebés.
En otro episodio de inseguridad en La Plata, delincuentes forzaron la entrada del Centro de Fotografía Contemporánea y se llevaron objetos de valor.
El hecho ocurrió previo a año nuevo en calle 12 y fue denunciado en las últimas horas: se llevaron 46 aparatos electrónicos. Escaparon sin ser detectados.
Carlos asumió la crianza de Arturo, su nieto e hijo de su hija María Nélida, y Haydee se dedicó a la militancia en Madres. El abogado asumió un rol silencioso de protección y colaboración apasionada a la causa de las madres desde las sombras.
Transportó a las madres de un lado para otro e hizo las veces de vigilante en la Catedral de Plaza de Mayo, también ayudó a muchos a salir del país en la clandestinidad en ese momento de la historia argentina.