La Municipalidad clausuró dos bares por no cumplir con las restricciones que dispuestas para evitar situaciones de contagio de COVID-19. Durante el operativo, los agentes desactivaron una fiesta clandestina en un edificio y cerraron kioscos que vendían alcohol fuera del horario permitido.
Las tareas estuvieron a cargo de la Secretaría de Convivencia y Control Ciudadano junto a los agentes de la Secretaría de Seguridad, con el objetivo de controlar el cumplimiento de las medidas de prevención dispuestas para evitar situaciones de contagio de coronavirus.
En los operativos de control se realizó la clausura del bar Bye Henry, ubicado en 44 entre 17 y 18, por no respetar el aforo y realizar un recital con músicos en vivo dentro del lugar, lo cual no está autorizado. También intervinieron en la cervecería Benoit, de 60 y 27 por tener exceso de clientes y no contar con la documentación correspondiente.
En ese marco y a raíz de una denuncia al 147, personal del municipio desplegó un operativo y logró desalojar una fiesta clandestina que se estaba llevando adelante en un edificio de 38 entre 29 y 30, sin respetar las medidas dispuestas para los encuentros sociales.

“Es importante que todos cumplamos con las disposiciones para evitar situaciones de contagio del virus. Debemos tomar conciencia sobre los riesgos que tiene concurrir a estos eventos en donde no se respetan las medidas de prevención y se pone en riesgo la salud”, señaló la secretaria del área, Virginia Pérez Cattáneo.

En el marco de los operativos desplegados esta madrugada, se trabajó con retenes preventivos en inmediaciones a parques y plazas públicas, con controles vehiculares y para evitar los encuentros sociales en parques y plazas de la ciudad.
Durante los mismos, se realizó el secuestró de 16 motocicletas y tres automóviles porque no contaban con la documentación correspondiente para circular.

Al respecto, el secretario de Seguridad de la Comuna, Darío Ganduglia, valoró que “se logró desarrollar un intenso despliegue de efectivos que nos permitió prevenir con operativos de control y al mismo tiempo desalojar eventos que no contaban con autorización y eran un riesgo para la ciudadanía”.
También se llevó adelante la clausura de kioscos que se encontraban vendiendo alcohol fuera de los horarios establecidos y que no contaban con la habilitación del REBA.

Cabe señalar que las multas para quienes organicen fiestas clandestinas en bares, salones de fiestas o casa quintas, las cuales se encuentran prohibidas, podrán alcanzar hasta los 2 millones de pesos, de acuerdo al artículo 104 del Código Contravencional.
Mientas que la sanción para las juntadas masivas equivalen al pago de hasta 1 millón de pesos y recaerá no solo en quienes organicen el encuentro, sino también en los propietarios del inmueble en el que se desarrolle y en todo el consorcio cuando se trate de edificios o barrios cerrados, de acuerdo al artículo 45 de la Ordenanza Municipal N° 6147.