El primer paciente con coronavirus que muere en un hospital de La Plata es un hombre oriundo de Brandsen que fue trasladado a la capital bonaerense cuando se le detectara la enfermedad hace casi un mes. Su caso se vincula epidemiológicamente con otros cinco que fueron detectados en una clínica privada de la localidad vecina.
La víctima es Omar Trippel, un hombre de 77 años que vivía en un campo de ese distrito aunque en su DNI tenía domicilio platense. Se contagió la enfermedad en el Intituto Médico Brandsen, donde fue operado de una fractura de cadera tras una caída en su casa.
De acuerdo con las previsiones de los expertos, un nuevo frente de tormentas azotará la región durante el fin de semana y piden a los vecinos mantenerse alerta.
Las autoridades locales y nacionales prevén un pésimo clima en La Plata y emitieron avisos por las tormentas pronosticadas para todo el fin de semana.
El 11 de abril pasado, después de esa intervención y cuando ya estaba de vuelta en el campo, comenzó con síntomas compatibles con el COVID-19, lo cual lo ubicó en la categoría de caso sospechoso. Para entonces, la clínica ya había sido noticia por la muerte de otras dos personas infectadas.
Cuando el diagnóstico fue confirmado el 15 de abril, Trippel fue trasladado al Hospital San Juan de Dios de La Plata junto con su hijo, también infectado.
Su estado se agravó en el transcurso de las semanas al punto que entró en terapia intensiva y fue necesario recurrir a un respirador artificial para asistirlo, mientras que su hijo evolucionó favorablemente. Finalmente el hombre de 77 años falleció en la madrugada de este viernes.
"Es el quinto paciente que muere con la cepa que afectó a vecinos de Brandsen", indicaron fuentes sanitarias. La transmisión de la enfermedad en ese centro asistencial llevó incluso a que se realizara un allanamiento ante la presunción de que hubo un ocultamiento de los diagnósticos.
El 16 de abril, un día después de que se confirmará el diagnóstico de Trippel, un equipo de policías y agentes del Poder Judicial concurrieron al Instituto Médico Brandsen, porque en menos de una semana murieron dos familiares directos del futbolista Walter Montillo, su abuelo Oscar y su papá Walter Oscar.
Hubo incluso denuncias del Municipio de Brandsen y otra de oficio donde se acusa a las autoridades del sanatorio de ocultar que en esos casos existía la sospecha de que se traba de un paciente con COVID-19.