El intendente Julio Garro firmó este martes el decreto para autorizar la prestación del servicio take away para todas las actividades gastronómicas de la ciudad, mientras dure el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Esta modalidad, que viene siendo implementada en Capital Federal, permite que los vecinos hagan pedidos de comidas y bebidas por teléfono o vía web y luego lo retiren en cada restaurante, bar o cervecería.
La Norma 448/20 remarca que los locales gastronómicos deberán cumplir con todos los protocolos de bioseguridad para evitar la propagación del COVID-19 en la región y no poner en riesgo la salud de los clientes.
La implementación del take away era una de las medidas que reclamaban los dueños o responsables de estos negocios para luchar contra la crisis que provocó el coronavirus en el país. Además, según pudo saber 0221.com.ar, el mandatario local recibirá este martes a representantes del sector, para oír sus demandas e intentar avanzar en posibles soluciones a la crisis que enfrentan.
Este lunes se reunieron unos 150 empresarios y propietarios de bares, restaurantes y cervecerías, con el objetivo de acordar acciones ante este difícil momento que les toca atravesar. A su vez discutieron sobre las medidas "imprescindibles para impedir el cierre masivo de sus locales y la consecuente pérdida de 12.000 puestos de trabajo".
En esa línea, los gastronómicos agrupados en PULPA, la Cámara de Empresarios Gastronómicos de La Plata, coincidieron en que se necesitan varias medidas para evitar bajar las persianas. Acceder a una línea de crédito a tasa 0, subsidios por parte del Estado y facilidades para abonar las impuestos, son algunos de los pedidos realizados, para ayudar al sector a luchar contra la crisis originada por la pandemia.

Al mismo tiempo, muchos de los dueños remarcaron que en la venta por delivery, el porcentaje que se llevan las aplicaciones de repartidores es del 30% y les resulta muy difícil poder generar ganancias suficientes para cubrir los gastos. Por este motivo, el take away puede convertirse en una medida importante para reactivar los restaurantes, bares y cervecerías de la ciudad.