Con más de 1200 conciertos en 35 países a lo largo de sus 17 años de trayectoria, La Pegatina llega con un nuevo álbum que incluye 10 canciones que recuperan la esencia de los primeros discos y la mezclan con la experiencia de sus últimos viajes y grabaciones.
Aquí su música parte de la rumba desatada, alocada y sin complejos que fusionan con el pop que aporta la producción del también catalán Tato Latorre, pieza clave en la organización, grabación y ejecución de un disco en tiempos de pandemia.
El título del álbum es una buena definición de la filosofía de La Pegatina, especialista en ver las cosas positivas de las cosas y de su mayor compositor y voz de la banda, Adriá Salas con quien 0221.com.ar charló sobre los detalles de su nuevo material.
-¿Cómo manejó la banda el aislamiento en plena creación del disco?
Es raro, fue un reto en realidad y me ha gustado poder tener tiempo para componer en casa, hacer arreglos. Que cada uno del grupo desde su casa estuviera pensando en el disco 24 horas y poder enviar cosas. Me ha parecido algo muy sano en realidad. Porque cuando estamos juntos todos le ponemos presión al resto. Y así cada uno ha tenido el tiempo que ha querido.
-¿Cómo los afecta para la promoción del disco?
A nivel de la salida del disco creo que hemos hecho menos promoción que en otras épocas por el tema que no puedes ir de gira por los medios de comunicación, pero nos permite hacer entrevistas por ejemplo en Argentina o en México, lo cual también está muy bien. Es otro concepto diferente.
-¿Cómo recibió el público Dar la vuelta?
Ha tenido un recibimiento increíble, al público nuestro le ha gustado, también es cierto que todo el mundo está en casas y es más fácil ponerse a escuchar música.
-¿Qué extrañan?
Lo que se echa de menos es poder tocar en un festival, en una sala de concierto porque cuando sacas el disco, la primera vez que te cantan los temas nuevos es super impactante.
-Hoy la pandemia cambió varias costumbres... ¿Creés que afectó a la manera de consumir música?
Desde que nosotros empezamos siempre hemos sido una banda que ha buscado innovar y renovarse y estar al día con las nuevas formas de consumo de la cultura e intentar ver dónde va el público. Pero es verdad que se hace difícil ahora, porque al estar en casa, todos sacan un montón de música y hay mucha oferta y a parte porque la forma de escuchar es otra: antes los discos te duraban años, la gente estaba un par de años con ese disco y ahora sacas uno y a las dos semanas ya la gente se olvida, se ha guardado las canciones que le gusta en una playlist y ya. Es otra cosa tenemos que atacar con singles.
-Su música se caracteriza por ser alegre y optimista. ¿Hay una estrategia para que sea así?
No, simplemente sale así. Nosotros somos así. De hecho, cuando nos juntamos a tocar sale esta música, buena onda.
-¿Hay temas más tristes en la discografía?
Si hay. Pero también pienso que está bien que esa canción alegre que la vas a cantar 1000, 2000, 3000 veces se convierten en mantras y si tú vas a cantar una canción triste 1000 veces acabas atrayendo eso, un poco. Y está bien qué si vas a cantar mucho, que por lo menos sea alegre y atraigas algo bueno.

¿Es una filosofía de vida?
Intento sacarle lo bueno a lo malo, siempre hay cosas positivas
-Son varios integrantes en la banda... ¿cómo hicieron para elegir los temas que quedaron en el disco?
En este disco entre la pierna rota que me mantuvo quieto un tiempo y la pandemia presente 40 canciones y de esas 40 elegimos 10. Nos manejamos con votación, luego de escucharlas las valoramos del 0 al 10. Salieron 15 que nos gustaban bastantes por encima del seis. Luego se las pasamos al productor, al manager y a la discográfica y ahí se acabaron de perfilar las que irían al disco.
¿En qué se diferencian Dar la vuelta con los otros discos?
-En cuanto al sonido se nota la presencia del productor Tato Latorre que viene de producir a bandas españolas muy famosas y que le dio ese punto pop a nuestra esencia musical que es la rumba catalana y algo más callejero. Aquí la rumba catalana sale muy fácil te pones a tocar y ya estas tocando rumba. En el anterior disco “Ahora o nunca” experimentamos un poco y nos fuimos hacia otro lado. Tuvimos a Rafa Arcaute como productor y él trabajaba de otra manera no entendía muy bien que era la rumba catalana o nosotros le presentábamos las canciones en rumba y de repente se convertían en otra cosa. Nosotros queríamos llegar al público latino y de repente perdíamos lo que nos gusta hacer. Entonces decidimos volver a lo que somos. Este disco continua con los dos discos anteriores a este que comentaba y nos gusta mucho por ello porque es un sello nuestro y de nadie más.