Este miércoles se llevó a cabo un importante debate en la ciudad, el cual contó con la participación de Julia Marcó, Directora Provincial de Querellas por Crímenes de Lesa Humanidad, y Agustina González Ceuninck, Directora de Desarrollo Institucional del Centro de Estudios para la Gobernanza.
Las dos reivindicaron el valor del rol de las mujeres militantes y la importancia de nutrir a la política con jóvenes en espacios de toma de decisión que puedan discutir problemáticas y llevar soluciones a los sectores que ambas representan.
Durante la hora y media de debate, Agustina y Julia trazaron contrapuntos sobre un amplio espectro de temas que incluyeron: desarrollo urbano, educación, empleo, derechos humanos, el rol de las mujeres y la necesidad de mayores estándares en materia de paridad.
La Directora Provincial de Querellas por Crímenes de Lesa Humanidad comenzó hablando sobre el desarrollo urbano de La Plata y señaló: “Producto de décadas de malas políticas pasamos de ser la ciudad de la innovación, la ciencia y el progreso a tener la mayor cantidad de asentamientos informales en la provincia”.
Y agregó: “En materia económica, social y de infraestructura, los platenses hemos sido víctima de muchos años de falta de políticas públicas que tienden a retomar el camino de la previsión, de la planificación a largo plazo, del crecimiento sostenible y sustentable. Afortunadamente, a partir de la decisión política que se ha tomado desde el gobierno pudimos ver que se inició un proceso de cambio, que trabaja para revertir el estado en que se encontraba la ciudad”.

Ceuninck, en tanto, aportó: “Entendemos el desarrollo como la consecución del buen vivir, para todas y todos, en paz, en armonía con el medio ambiente, aceptando las diversidades culturales, desde una perspectiva de derechos humanos y de género. No significa solamente cuidar el medio ambiente, es ante todo repensar las lógicas económicas que habilitan prácticas insostenibles. Para nosotros lo más importante es el ser humano y su entorno ecosistémico, no el mercado”.
Y amplió: “No podemos esperar que el Estado tome esta agenda, tenemos que generar conciencia desde abajo, produciendo cambios en nuestros espacios de militancia para que estos temas presionen y tomen fuerza. Nosotros lo estamos haciendo, a partir de iniciativas como por ejemplo el acompañamiento al Movimiento de Empresas B y la propuesta de despapelización de las campañas”.
Otro de los temas que surgió en el centro de escena fue la educación. “No podemos desconocer el fenómeno de feminización e infantilización de la pobreza. Esto demanda respuestas concretas y focalizadas. Creemos que en la ciudad de La Plata es indispensable generar una red de guarderías, cuyo sistema está totalmente colapsado, que iguale las posibilidades de educación en la primera infancia. Que sean gratuitas y donde los niños y niñas puedan comer. Además, esto permitiría disminuir la brecha entre géneros, ya que habitualmente, si ese servicio no se puede pagar, son las madres las que quedan al cuidado, participando menos en las tasas de empleo o exponiéndolas a dobles jornadas laborales”, expuso Agustina González.
Y aportó: “Por eso hemos presentado un proyecto en la legislatura, que cuenta con estado parlamentario, en el que proponemos un sistema integral de cuidados en la Provincia de Buenos Aires, para que el Estado intervenga en esta desigualdad brindando servicios.” haciendo hincapié sobre la necesidad de los ciudadanos platenses que no pueden llegar a cubrir los servicios básicos ante las dificultades económicas.
Ante estos puntos, Julia aportó: “Estoy de acuerdo con que el tema de la educación es fundamental y es la primera herramienta para generar inclusión, una sociedad más justa y más igualitaria, y en este sentido, este gobierno cuando llegó en el 2015 no contaba con un registro de cuántas escuelas había en la provincia de Buenos Aires… ¿Cómo te parás a construir, a proyectar? Si cuando llegas a la Dirección Provincial de Cultura y Educación no se sabe cuántos establecimientos educativos tiene la Provincia, no se sabía cuántos alumnos había, cuántos docentes se encontraban inmersos en el sistema educativo público de la Provincia de Buenos Aires”. Además, destacó el resultado que da tener un sistema de seguimiento como las Pruebas APRENDER y remarcó “Hay un programa que se llama Red de Escuelas de Aprendizaje, que lo que hace es empezar a conectar todas las escuelas que según las pruebas APRENDER, muestran que tienen el mismo déficit, principalmente en matemática y en lengua. Los resultados empiezan a mostrar que son muy buenos cuando se empieza a fortalecer y todo el aparato educativo trabaja coordinado para atacar estas problemáticas y dificultades”.

Por último, las jóvenes dirigentes coincidieron en la necesidad de fortalecer el rol de la mujer en la política, en hacerla partícipe no solo de las listas sino también de la toma de decisiones, por eso mismo Agustina afirmó. “Hemos avanzado mucho en relación al vínculo entre las mujeres y la política. La ley de voto femenino, la ley de cupos, la ley de paridad. Sin embargo, aún quedan muchos desafíos. Las elecciones de 2017 dieron cuenta que, si bien se cumplió con la ley de paridad, sólo el 24% de las listas presentadas en la Provincia de Buenos Aires y Ciudad de La Plata, estaban encabezadas por mujeres. Claro que esto tuvo su correlato en la conformación de la legislatura. No se logró aún la paridad sustantiva. También en la Provincia de Buenos Aires contamos con una Gobernadora mujer, no obstante, el 100% de su gabinete, entre ministros y secretarios, está compuesto por varones. Las leyes de discriminación positiva no son un piso, sino que se transforman en un techo, los partidos políticos cumplen con ellas porque la ley los obliga, pero no hay un verdadero cambio en su estructura.”
Julia por su parte dejó en claro desde dónde toma fuerza el posicionamiento de las mujeres “rescato que hace poco salió publicado un informe que habla de los Centennials, que dice que para los jóvenes de entre 18 y 24 años empiezan a ser líderes las mujeres, de entre 35 y 44 años, por eso yo creo que todo lo que hemos vivido en los últimos años, y sobre todo desde el 2015 con la irrupción del #NiUnaMenos, que cuestionó el rol de la mujer en todos los ámbitos. No fue solamente un grito en contra de la violencia de género para que pararan de matarnos, sino que también significó poner a la mujer en una lucha transversal hermanadas, sin importar de que espacio político venimos, y me parece que eso, caló muy hondo en las generaciones jóvenes”. Además, agregó “Es muy satisfactorio que los jovenes empieza a ver que los liderazgos tienen que ser femeninos, y para mi tienen que ser femeninos porque hemos logrado las conquistas de las mujeres, que fueron siempre transversales, a partidos políticos, a distintos espacios, ninguna conquista se logró por exclusividad de algún político, se logró con todas juntas”.