viernes 13 de septiembre de 2024

Bilardo y Griguol escribieron su historia en el clásico de la ciudad

Carlos Salvador Bilardo y Carlos Timoteo Griguol son dos de los entrenadores más emblemáticos que Estudiantes y Gimnasia tuvieron en su historia, y a horas de un nuevo clásico platense vale repasar la única vez que estuvieron frente a frente en el partido más atractivo de La Plata.

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Fue en el clásico 135 de la era profesional, en el Bosque, un 4 de abril de 2004. Fue de las previas que mayor atención acaparó por el rol de los técnicos y por el peso específico de semejantes conductores, casi la contracara de esta edición donde el Pincha estará conducido por un interino como Pablo Quatrocchi y el Lobo por Darío Ortíz, en el inicio de su camino.

Aquel derby además tuvo el condimento de una temperatura elevada, todo un récord para un mes de abril. Fue 2 a 2, el árbitro Héctor Baldassi. Abrió la cuenta Horacio Cardoso con una bomba desde afuera del área, a los 30 aumentó Marcelo Carrusca de penal. Así se cerró la primera etapa.

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La historia cuenta que el Narigón hizo bañar con agua fría a los futbolistas en el entretiempo y ya nada fue lo mismo. Los de Timoteo se recuperaron, a los 22 descontó Marcelo Goux y cinco minutos más tarde igualó el uruguayo Diego Scotti.

Más allá de esa historia en común, Bilardo y Griguol escribieron varios capítulos en el derby platense. El doctor como jugador y DT, y Timo como conductor del ciclo más exitoso del fútbol tripero.

Griguol dirigió un total de 16 clásicos, 4 por torneos de verano y 12 por partidos de campeonato. En el verano se mantuvo invicto con un empate en Necochea y tres triunfos, dos en Mar del Plata y uno en 60 y 118.

En total los números del Viejo en el banco del Lobo arrojaron 5 éxitos, 8 empates y 3 derrotas. Enfrentó seis veces el profe Daniel Córdoba, cinco a Patricio Hernández, cuatro a Oscar Craviotto y la citada a Bilardo. Su victoria más recordada fue el 18 de marzo de 1998. Su equipo ganó 3 a 0 y borró de la cancha a su rival, con gol de Andrés Yllana y dos de Roberto Sosa.

El Narigón por su parte, como futbolista disputó 10 clásicos oficiales, ganó 5, igualó 4 y perdió el último que jugó. Su triunfo más contundente fue como visitante en el Metropolitano de 1968 por 6 a 1. En el banco, fue el orientador albirrojo en tres etapas: 1971, 1973-1976 y 2003-2004.

Dirigió 19 clásicos, de los que ganó 8, empató 7 y fue derrotado en 4. Uno de los más recordados fue el 3 a 3 del 9 de marzo de 1975, día en que Juan Ramón Verón marcó un gol y nacía el hoy presidente, Sebastián.

 

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