La víspera de la elección de las nuevas autoridades del Concejo Deliberante dejó varias postales que demarcan un escenario político en el que se consolida la posibilidad de que Ileana Cid sea electa presidenta del cuerpo. Pero lo que entró en un cono de dudas es que se concrete un reparto ciento por ciento femenino: en el oficialismo cayó mal “el silencio” de Lorena Riesgo, actual vicepresidenta primera, quien además no concurrió a la reunión de labor legislativa. Cobró cuerpo, entonces, la chance de que sea el peronista Fabián Lugli, quien ocupe su lugar. De concretarse ese esquema, las autoridades del cuerpo se completarían con la massista Virginia Rodríguez.
Las dudas se evacuarán cerca del mediodía de este martes cuando arranque la sesión. Pero empezaron a despejarse después de que los sectores opositores que intentaron una movida para ir por la presidencia empezaron a mostrar resignación. Al parecer los acuerdos que algunos de ellos tienen con Cambiemos pesaron más y el grupo que más fogoneó la idea nunca tuvo la certeza de contar con los votos necesarios para imponerse en una pulseada de alto riesgo.
Si se confirma que el intento fue fallido las heridas serán profundas. Algunos se quejan de que el viernes pasado, cuando 11 de los 12 concejales opositores tuvieron representación en una reunión de “virtual interbloque” más de uno calló que no pensaban subirse a la movida. El único que no estuvo, ausente en la ciudad, fue Gastón Crespo, del GEN.
Esa situación explotó este lunes cuando hubo un vacío importante en la reunión de Labor Legislativa en la que se planifican las sesiones. Fue la última actividad formal de Fernando Ponce como presidente antes de que el cuerpo apruebe su licencia. Estuvieron sólo el presidente del bloque Cambiemos, Claudio Frangul, Lugli y el propio Crespo, ya de regreso.
Los massistas Luciano Sanguinetti y Virginia Rodríguez estuvieron ausentes con aviso por su presencia en Mar del Plata acompañando una actividad de Alternativa Federal. “Sin aviso” para el oficialismo fueron las deserciones de la randazzista Riesgo (algunas versiones la ubicaban también en Mar del Plata) y Gastón Castagneto de Unidad Ciudadana.
En el oficialismo están confiados porque consideran que probablemente sean 16 los concejales que den el quórum y los que voten a Ileana Cid como presidenta. El desenlace para los otros dos cargos es más incierto
EL DEBUT
El otro escenario fue el debut de Natalia Vallejos en una reunión del bloque Cambiemos aunque todavía no asumió formalmente. La ex jefa de gabinete asumirá la banca que deja Ponce y para hacerlo emprendió un cambio de vida que implicó una mudanza desde más mil kilómetros. Se había ido a Eldorado en Misiones después de dejar el cargo en medio de un malestar en la interna oficialista.
Este lunes concurrió a la primera reunión a la que también acudió el intendente Julio Garro. Fue todo un gesto, casi una bienvenida para la nueva edil que jurará el martes, y un respaldo político para su bancada en medio de una situación que obligó a convocar a la sesión especial.
Quien no estuvo, por motivos obvios, fue Florencia Rollié, la radical disidente que de todos modos expuso públicamente la mirada más crítica respecto del oficialismo a través de un comunicado en el que habla de “mamarracho jurídico”.
La edil de la UCR explicó que “los actos administrativos previos a la convocatoria para la sesión del 5 de febrero son de nulidad absoluta y la tornan inviable la misma”. Por eso aseguró adelantó que no piensa convalidarla “hasta tanto los mismos no se resuelvan adecuadamente”.
“Es temerario que un concejal que ejerciera durante 3 años la presidencia del cuerpo pretenda arrogarse atribuciones que son propias e indelegables del conjunto de los ediles. No llama para nada la atención, lamentablemente, que Fernando Ponce desprecie o desconozca la normativa para el órgano que presidió. Pero aún, siendo el último acto de su penosa gestión, no puede ser de ninguna manera avalado” afirma Rollié en uno de los párrafos más duros.
