Tras el arranque de la transición, el presidente Alberto Fernández dijo este martes que "ojalá" su sucesor, el libertario Javier Milei, "haga las cosas bien" porque, si eso ocurre, "le irá bien a la Argentina", al tiempo que aseguró que no se siente "responsable" de la derrota del candidato de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa.
"Ojalá el nuevo presidente haga las cosas bien, no comparto muchas de sus miradas, pero si le va bien, le va bien a la Argentina, y yo no quiero ser un obstáculo", indicó el jefe de Estado en una entrevista que brindó al canal colombiano NTN24 tras mantener la primera reunión con Milei en la quinta de Olivos.
En el adelanto de la nota, que se emitirá completa este martes por la noche, habló de la transición, de la derrota peronista e hizo un balance de su paso por la Casa Rosada.
Sobre la reunión con Milei, quien lo sucederá a partir del 10 de diciembre, detalló que "se extendió por dos horas donde le transmití mi visión en temas nacionales, internacionales, mis experiencias y escuché sus apreciaciones". También habló de la foto, en que se los ve serios, y aclaró que "no eran caras largas, era una reunión institucional que requería seriedad, fue una reunión cordial, amable".
"Fue una buena reunión en tiempos donde la democracia más lo exige, para no hacer traumáticos los cambios, deben ser simples, fáciles", consideró y evitó contar de qué temas hablaron o qué consejos le dio al líder de La Libertad Avanza. "Lo que hablé con él queda entre nosotros, no estoy para dar consejos, si le di mi mirada como presidente y mis experiencias. Claramente no pensamos igual, sino muy diferente", agregó.
Fernández también fue consultado por la derrota de Unión por la Patria el domingo y, puntualmente, sobre si se sentía responsable. Y respondió: "No, todo el espacio debe replantearse cosas que ocurrieron estos cuatro años y ver qué nivel de responsabilidad le cabe, lo que sí es evidente es que no hemos podido sintonizar con mucha gente del pueblo".
En este punto, defendió su gestión y remarcó todos los problemas que debió afrontar. "Es un gobierno que ha atravesado cuatro años de muchos problemas como la deuda, la pandemia, la guerra y la mayor sequía en 100 años. Ante la adversidad que vivimos, los resultados deberían ser más ponderados", consideró.