La platense que participó de GH visitó el estudio de No es una copia. Habló de su paso por el reality, su amor por la pesca y su sentimiento por Gimnasia.
Sandra Priore, la exparticipante de Gran Hermano oriunda de La Plata, pasó por No es una copia, el streaming de 0221.com.ar, y dejó definiciones fuertes sobre su experiencia en el reality. Habló de su familia, del impacto de la fama, su sueño de estar en MasterChef y su firme decisión de seguir viviendo en su ciudad.
La tripera nacida en City Bell y actualmente vecina de Los Hornos, se definió como una mujer que no necesita de la televisión para validar su vida. "Hoy me piden fotos, pero sigo siendo la misma de siempre. La fama es transitoria", afirmó. Lejos de sumarse al circuito de boliches y eventos post-reality, Sandra contó que priorizó su tranquilidad familiar: "Desde que salí hubo más de 20 fiestas. No fui a ninguna".
Cruzó los Andes por los seis pasos por los que se aventuró José de San Martín y su Ejército y visitó todos los sitios emblemáticos ligados al prócer en América Latina. Conocida como la "Dama de la Cordillera", ahora planea seguir las huellas del Libertador en Europa.
La agenda del Qué Hago para las vacaciones de invierno en La Plata está repleta de actividades con música, teatro, cine y más. Todas las opciones.
Durante su paso por GH, Sandra fue una de las participantes más genuinas y visibles. Recordó cómo enfrentó la llegada de nuevos jugadores que ingresaron con ventaja, como Selva, su principal contrincante. "Entró con toda la información, sabía con quién me llevaba bien y cómo jugaba cada uno. Hasta me quería sacar de la cocina", recordó.
También se refirió al momento en que su marido Lucas ingresó a la casa, emocionándola, aunque sin transmitirle ninguna información: "Ni una seña me hizo. Es estructurado, no supo cómo". Sobre su polémica por "chuparse los dedos" mientras cocinaba, respondió con humor: "Era mi casa, mi cocina. Cocinaba como para mis hijos y sus amigos".
Sandra dejó en claro que su gran sueño no es la televisión, sino la pesca. "Mi papá era pescador, y desde chica me encantó acompañarlo. Quiero ser guía de pesca para mujeres. La pesca es un ambiente muy machista, pero estoy decidida a abrir ese camino", sostuvo. Contó que grupos de mujeres de Goya, Corrientes, ya se contactaron para trabajar con ella.
Además, reveló su deseo de participar en MasterChef: "Me encanta cocinar pescado al aire libre, es lo que más disfruto. Me encantaría estar en el programa, incluso me piden que me anote en el de Uruguay".
La ex GH también se refirió a su identidad platense y su fanatismo por Gimnasia. "Lo primero que llevé a la casa fue al Lobo. La mayoría no entendía cómo podía haber tanto sentido de pertenencia en una ciudad. Los porteños no tienen barrio como nosotros", explicó.
Con orgullo, defendió la popularidad del club de sus amores: "City Bell será pincha, pero yo me hice tripera con mi primer novio. Gimnasia es el club del pueblo, el de la gente".
Sobre el final, Sandra fue clara sobre el impacto del reality: "A mí Gran Hermano no me cambió la vida. Yo sigo en La Plata, con mi familia, mis hijos, y mi vida sigue como antes. A los que están por entrar, les digo que lo aprovechen para sacar herramientas, pero después, como todo, depende del esfuerzo de cada uno".