A dos semanas del inicio de la demolición del depósito de Aloise Tecno, los expertos intentan determinar si la estructura que queda en pie está firme.
La demolición del depósito incendiado de Aloise Tecno se encuentra paralizada desde hace varios días y en un impasse, mientras la Municipalidad de La Plata junto con expertos de la Universidad Tecnológica realizan estudios técnicos para definir cómo continuarán lo trabajos.
Según pudo saber 0221.com.ar, en la próximas horas se realizará un estudio clave para la evaluación de la estabilidad de lo que queda en pie del depósito incendiado ubicado en diagonal 77 y 48, con el objetivo de determinar cómo continuará el proceso para tirar abajo toda la estructura.
Avanza la demolición del depósito incendiado en La Plata, con un operativo complejo, múltiples damnificados y pérdidas millonarias en evaluación.
Se suspendieron las tareas de demolición del depósito incendiado en el centro de La Plata por un grave daño estructural. Usarán un robot especial.
La inspección estaba prevista para el martes, pero fue reprogramada y se realizará en conjunto con expertos de Universidad y la Comuna, con el fin de definir si la estructura restante representa un riesgo de derrumbe.
Las fuentes consultadas por este medio indicaron que, en caso de que la estructura evaluada no presente riesgos, es probable que la demolición se detenga y la base actual quede como parte de la edificación definitiva.
Una vez que esa inspección se realice y se obtengan lo resultados, los mismos serán comunicados al fiscal a cargo de la causa, Juan Cruz Condomí Alcorta, quien finalmente decidirá el curso a seguir respecto a la demolición del depósito. En ese marco, podría definirse que la estructura que queda ya no representa un riesgo, por lo que la demolición -a través del Grupo Mitre- llegarían a su fin. Ese escenario permitiría el regreso de los vecinos de los edificios linderos que se vieron obligados a dejar sus viviendas.
La demolición mecánica del depósito que sufrió un incendio y derrumbe el 16 de julio pasado arrancó hace más de dos semanas y luego de atravesar la etapa más delicada, en la que se utilizó un robot de demolición, la actividad en el edificio se redujo notablemente. En lo que va de esta semana las tareas fueron escasas y se centraron en la limpieza del lugar, donde aún permanecen numerosos electrodomésticos como aires acondicionados, lavarropas y cocinas, que esperan una resolución sobre su destino.
El encargado del grupo de demolición, Fabián Damore, dijo citado por El Día tras finalizar los trabajos con maquinaria pesada en el área más compleja de la obra -por la altura y proximidad a viviendas-, que en caso de seguir adelante la demolición completa del edificio debería demorar entre 15 y 20 días más.
Esto indicaba que los trabajos podrían finalizar a fines de agosto, pero con la paralización actual y la espera de resultados de los estudios, se abre la posibilidad de una modificación de los plazos originales. El cartel de obra que está en el lugar de la demolición indica un plazo de trabajo estimado en 30 días desde que los mismos arrancaron el lunes 28 de julio.
Mientras tanto, decenas de familias aguardan poder regresar a sus hogares y los comerciantes locales esperan recuperar la normalidad en sus ventas tras el siniestro ocurrido, momento desde el cual el tránsito en esa esquina está cortado.
Como informó 0221.com.ar, los vecinos de los edificios cercanos que quedaron afectados por el siniestro continúan evacuados, la mayoría en casas de familiares o amigos, pero también en hoteles que se pusieron a disposición especialmente.
De acuerdo a lo informado por la Municipalidad, en total son 187 personas las que continúan evacuadas como consecuencia del incendio y posterior derrumbe del depósito. De ese total, 25 vecinos fueron alojados en hoteles, en un operativo de asistencia coordinado por el Municipio junto a la Cámara de Hoteleros local y, por ejemplo, existe una veintena de habitaciones ocupadas con vecinos evacuados en el Hotel del Sol.
El número de personas alojadas en plazas hoteleras aumentó después de las vacaciones de invierno, cuando regresaron muchos estudiantes de otras ciudades. En los días posteriores al siniestro, esos asistidos eran solo siete, pero "al no poder regresar a sus viviendas algunos solicitaron ayuda al Municipio para conseguir alojamiento temporario", explicaron desde la Comuna.
El resto de los evacuados se encuentra en casas de familiares o amigos. Por el momento, no hay una fecha definida para el regreso de los vecinos a sus hogares y las autoridades advierten que la prioridad es garantizar condiciones de seguridad estructural y ambiental antes de permitir el retorno a la zona afectada. El estudio que se realizará en las próximas horas podría cambiar el escenario.