Mayo cerró con la inflación más baja en 5 años, pero especialistas alertan que aún restan subas clave en tarifas que podrían limitar la caída.
El dato de inflación de mayo sorprendió al marcar un 1,5%, el más bajo en 5 años. A esto se sumó una caída de 0,3% en los precios mayoristas, lo que alimentó el optimismo sobre una posible consolidación de la tendencia desinflacionaria; pero diversos analistas advierten faltan aplicar subas en precios regulados como tarifas.
En la consultora IEB señalaron que, en el marco de una economía bimonetaria como la argentina, para derrotar a la inflación no alcanza con equilibrar el mercado de pesos: también es clave estabilizar el tipo de cambio. Según explicaron, la salida del cepo al dólar sin sobresaltos y el nuevo esquema de bandas cambiarias brindan un escenario favorable, aunque advierten que los aumentos de tarifas pendientes pueden fijar un "piso" a la baja de precios.
De las distintas tribus peronistas hasta los gremios y organizaciones sociales, se espera una fuerte presencia de La Plata para respaldar a Cristina Kirchner.
El artista plástico Miguel Ángel Velit, egresado de la UNLP, presenta su muestra sobre la ciudad en el Museo de la UCALP.
En mayo, la inflación de bienes fue de solo 0,9%, mientras que los servicios treparon 2,7%. Esa diferencia ayuda a explicar por qué, a pesar del descenso del índice general, muchas familias siguen sintiendo presión en sus gastos diarios. El retraso en los precios de servicios regulados como el transporte público, la luz y el gases uno de los factores que el Gobierno deberá seguir ajustando.
La inflación de bienes fue de solo 0,9%, mientras que los servicios treparon 2,7%.
GMA Capital estimó que los precios regulados todavía deben aumentar 21 puntos porcentuales más que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) general para recomponer su valor real. Ya se anunciaron subas mensuales en la electricidad y el gas del 2,6% y se prevén ajustes bimestrales en el transporte, por encima del ritmo de dicho índice.
Pese a este contexto, en Grupo SBS consideran que la inflación podría volver a desacelerarse en junio, salvo que haya un fuerte deterioro en las expectativas cambiarias o un salto brusco en los tipos de cambio paralelos, dos escenarios que hoy no parecen probables.
Portfolio Personal Inversiones agregó que los servicios no regulados ya no tienen demasiado margen para seguir subiendo, mientras que los regulados podrían recuperar algo de terreno, aunque con limitaciones. Según sus cálculos, estos servicios regulados representan actualmente el 15,2% del IPC, frente al 18,1% que llegaron a tener en 2019, lo que indica que todavía hay margen para corregir.
De todos modos, los analistas no esperan grandes aumentos en la antesala electoral. "El Gobierno buscará profundizar la tendencia desinflacionaria y llegar a las elecciones con el menor nivel posible de inflación", concluyeron.