Los arquitectos responsables del Nº 101 para el Bosque, visitaron el mediahub de 0221.com.ar, y dieron detalles de su idea para el nuevo estadio de Gimnasia.
Los socios y socias de Gimnasia ya saben que tendrán una asamblea donde elegirán al proyecto ganador para la remodelación del Estadio del Bosque. Es por ello, que los arquitectos que diseñaron el proyecto 101, visitaron el mediahub de 0221.com.ar, donde dieron detalles de su trabajo y la viabilidad del mismo.
Los arquitectos Diego García y Sebastián Sayar dieron detalles del proyecto, diseñado junto a sus pares Matías Zoppi y Lautaro Sessa, con Joaquin Gevara, Facundo Rolandi y Sofía Stambuk. Más allá de la entrevista exclusiva que le dieron a 0221.com.ar, se pueden conocer más detalles del trabajo realizado en su cuenta de Instagram que es @proyecto101.cge.
Gimnasia dio a conocer los detalles del tercero de los tres proyectos ganadores que competirán para la remodelación del Estadio Juan Carmelo Zerillo.
Se hace mucho hincapié en la conexión del Bosque con el Estadio Juan Carmelo Zerillo, con la idea de que tome la centralidad de la ciudad de La Plata, en un proyecto planteado para que sea realizable y real.
—¿En qué se inspiraron para realizar el proyecto?
Diego García (DG) —Uno no busca una misa inspiradora o analogías, si nuestro proyecto tiene como un eje muy claro, lo que tiene que ver con el Bosque y lo que es para el club como nosotros entendemos que constituye la idiosincrasia del club, ese fue un gran disparador.
La idea es integrarlo al proyecto porque entendemos que es una característica actual, pero uno cuando puede caminar por el Bosque ve al estadio y viceversa. Hay una cuestión básica de la gente que no dice que va a la cancha, va al Bosque y eso tiene que ser nuestro eje rector. No queremos que deje de ser así.
Sebastián Sayar (SS) —Es muy fuerte el Bosque e impregnante a la hora de las estrategias que uno elige para resolver el problema que se le presenta, que entren en consonancia con el Bosque. No es una inspiración en términos de formas, pero si todo lo que se pone en juego están determinadas por el entorno.
Hemos mirado muchísimos espacios que compartía alguna similitud como la cuestión de la escala y el tamaño, y ver como otros resolvieron problemas similares para poder trasladarlo al tuyo y ver de qué manera se puede traducir. Usando los programas para diseñar el proyecto, ya habíamos diseñado estadios.
—¿Esperaban ser elegidos?
DG —La verdad que sí, porque ya tenemos cierto historial de concursos, y uno cuando llega al momento de la entrega puede evaluar el producto terminado y te das cuenta si es potable o no. Le teníamos mucha fe porque habíamos llegado a un grado de proyecto muy logrado.
—¿Es el proyecto que mejor refleja la identidad?
DG —La idiosincrasia entra en consonancia con las estrategias vectoras del proyecto. Nosotros queremos que la gente se identifique con este proyecto y es el mayor de los anhelos. Que constituya la identidad del club. También es algo que nos interpela a nosotros como socios e hinchas que vamos a la cancha, está en nuestras familias. Cada vez más gente a la cancha, cada vez somos más entonces es latente el reclamo la comodidad. La idea es que sea una centralidad en la ciudad y que tenga un uso intensivo.
SS —Está la cuestión de ver el predio y del patrimonio que tiene el club, y la posibilidad de potencial que tiene de ser un centro de actividad también para el Bosque y la ciudad, y por eso también no es solamente el estadio, pero la pileta cubierta permitiría que funcione todo el año, y el polideportivo además de acomodar todas las actividades que se superponen, le daría un lugar adecuado para un club que es enorme con muchas disciplinas que necesitan un lugar para desarrollarse mejor.
Además de respetar el patrimonio y lo que tiene construido hasta ahora, es generar con el resto de la intervención un sentido de unidad que genere una chancha que sea reconocible como un estadio que permita que no sea como lo que es hoy, que son todas piezas heterogéneas.
Con el techo y su cubierta, se respeta la altura de los árboles como de la platea histórica, y dentro de esa altura uniforme el único elemento que sobre sale e ilumina el paisaje es la Platea Néstor Basile por una cuestión de la escala actual, por lo que tratamos de que todas las piezas trabajen en conjunto a pesar de que sean autónomas en sí mismas.
DG —Otro punto importante es la cinta azul que es una plataforma que reúne los tres volúmenes: el Polideportivo, el estadio y la pileta, como espacio de interacción con la ciudad y no generar una fachada con rejas y cercada. Hay dos calles que la atraviesan: una tiene que ver con el área social y de los socios, y otra con el flujo de gente donde además habrá locales comerciales. Es un nivel superior por dónde uno puede circular, pero nos interesa intentar con esa pieza como definir los límites del perímetro dándole lo mejor a la ciudad con arquitectura, pero con una percepción física de cuál es realmente el patrimonio del club.
SS —La plataforma lo que te permite son espacios nuevos de comercios y gastronomías, y además se puede llevar todo el movimiento de gente con un sistema de escaleras a un nivel superior o inferior, y te permite tener la planta baja liberada con interacción con la ciudad todos los días de la semana. La conexión del Bosque y la cancha para nosotros es muy importante.
DG —El techo es una cubierta traslúcida porque tiene que ver con el sentido de permeabilidad del Bosque, pero también queríamos que la luz lo siga atravesando. Este techo se pliega, pega la vuelta y se convierte en piel y te protege de manera envolvente.
Todo lo que es patrimonial tiene un valor arquitectónico que también constituye la identidad histórica del club no lo podemos tocar, integra también el proyecto, donde interactúan como en la esquina del monumento de llegada al estadio.
—¿Por qué un estadio para 42 mil personas?
SS —El Concurso planteaba esta ampliación como una necesidad para el club y que luego en un futuro sumar hasta 50 mil. En esta primera instancia planteamos 42 mil espectadores sin contar los palcos que están repartidos en el nivel medio y superior de la Platea Néstor Basile, y las anexas a la Platea René Favaloro. Eso nos da una cantidad de 118 palcos que llevarían a la capacidad total de 44 mil espectadores.
Apuntamos a que el piso sea de 42 mil sin contar palcos porque esos son los estándares que te permiten desarrollar partidos internacionales, y también Gimnasia puede postularse para que Gimnasia para jugar la final de un certamen.
—¿Cómo va a ser el Polideportivo?
SS —Le puede generar muchos recursos al club, lo hicimos con una lógica muy sistemática y de simpleza y de que pueda funcionar de muchas maneras. En el Concurso se pidieron dos canchas de básquet, dos de vóley, playón de patín y gimnasia artística, pero también puede darse futsal, desplegarse gradas y hacerse un recital en la planta baja para 5 mil personas aproximadamente.
DG —Lo que tiene que ver con el flujo de gente que caminan de calle 122 a 1, que más que nada son universitarios y pasan muy rápido porque es muy oscuro, y te sentís muy inseguro, la idea que esto genera una centralidad donde la gente camine de forma segura y que sea un lugar al que quiera ir. Relacionar al estadio con la ciudad, y la relación de la ciudad y el Bosque.
—¿Es importante la construcción por etapas para su financiación?
SS —Dentro de la obra está la posibilidad de ejecutar una cabecera primero y después la otra, y dentro de una cabecera, ejecutar la primera bandera y después la otra. Está muy pensado desde esa lógica que sabemos que es muy complicado financiar toda la obra de una sola vez. Hay que darle todas las posibilidades a Gimnasia para que sea lo más realizable posible, después quizás, se pueden hacer varias etapas juntas, pero depende del club.
DG —Entendemos que todo lo que son los servicios tiene que poder servir como una herramienta de financiación, mismo en la parate de atrás de la Platea Néstor Basile proponemos una nueva fachada, tenemos espacios para salas de eventos y coworking, y también son esas estrategias de posible financiamiento del club y también los palcos, sumado a los eventos que se puedan hacer.
También de forma subterránea hay un estacionamiento que va de punta a punta en esa zona que lo va a administrar el club, por ejemplo, los días de semana, podría funcionar para la sociedad, y el día del partido también depende del operativo de seguridad el día del partido, que fácilmente puede controlar los tres volúmenes por separado.
—¿Por qué creen que el socio tiene que elegir el proyecto 101?
SS —Es un laburo del que estamos muy orgulloso y le pusimos mucha energía y dedicación. Lo pensamos mucho, desde la capacidad que Gimnasia lo pueda ejecutar por etapas y que sea un nuevo centro de la ciudad para toda la sociedad. Entendemos que tiene que ser una propuesta que le haga bien al hincha y socio de Gimnasia, al que hace deportes, y al Bosque y toda la ciudad.
DG —Venimos de la universidad y nos sentimos parte de eso, cada uno está ejerciendo un rol docente en arquitectura, donde es importante las cuestiones sensibles de intervenir el patrimonio. Entendemos que esta es la propuesta más válida. Cuando vemos el producto terminado, lo vemos y lo creemos, y la gente así lo percibe por las devoluciones que fuimos teniendo. Es un proyecto que es factible de ser hecho y eso le da un sentido de realidad.