La partida de Cristian Tarragona está cerca de ponerle fin a una gran camada de jugadores en el Lobo. Con su salida, se van muchos goles, jerarquía, referencia y liderazgo. Como habíamos informado en 0221.com.ar, Gimnasia le había hecho una oferta superadora pero el deseo de jugador era cambiar de aire. Había estado cerca de llegar a Colo Colo de Chile y Cerro Porteño de Paraguay, pero la sanción Conmebol de 5 partidos que carga, complicaron los planes.
Sin embargo, en las últimas horas, se avanzó con su llegada a San Lorenzo que acordó de palabra su arribo a la espera de la documentación. Cuando estén todos los papeles y el Ciclón levante la inhibición, estará firmando su nuevo contrato hasta diciembre del 2024. De esta manera, poco queda del equipo que supo pelear el campeonato de la Liga Profesional 2022 y que clasificó a la Copa Sudamericana. Además, es el responsable del gran promedio que tiene Gimnasia en un equipo que jugaron todos juntos.
Haciendo un repaso de caso por caso, está el de Rodrigo Rey, que también se había identificado con Gimnasia, y que dejó un vacío enorme en el arco, siendo uno de los mejores arqueros del campeonato de aquella temporada, y que terminó atajando en Independiente ante una mejor oferta. Otro caso es el de Brahian Alemán, que no se fue de la mejor manera por cómo se manejaba internamente, pero que le dio a la camiseta número 10 de Gimnasia un salto de calidad impresionante, haciéndolo uno de los mejores jugadores del fútbol argentino. También por cuestiones económicas y de deuda, terminó recalando a mitad del año pasado en Banfield.
Siguiendo con la lista, tenemos a Ramón Sosa, cuya llegada fue toda de Néstor Gorosito por su conocimiento de cuando dirigió en Olimpia de Paraguay. La rompió toda en Gimnasia y Talleres se fijó en él. Un jugador como hacía tiempo no se veía en el Lobo que termina dejando el club por una deuda integral con él, su representante y los clubes desde donde procedía. Otro acierto de Pipo: Agustín Cardozo, volante central con clase que lo había tenido en Tigre y le dio mucho a Gimnasia. Otro que se encariñó mucho con el club, pero las deudas hicieron imposible que siga. Hay chances que vuelva.
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Qué decir de Luis Rodríguez, que reconfirmó en Gimnasia toda su calidad y capacidad goleadora y que le dio muchas alegrías al equipo. El dinero y cuestiones personales, fueron motivo para que el Pulga no pueda continuar. Por último, y aunque fue uno de los primeros que se fue, tenemos a Johan Carbonero, una búsqueda similar a la de Ramón Sosa, con juventud y demostrando todo su potencial. Acá también Gimnasia lo tuvo que terminar negociando para salvar una deuda.
Teniendo en cuenta este panorama, el único que queda de aquel equipo es Leonardo Morales, el capitán del Lobo, que pidió un plantel competitivo para no tener que pasar por lo mismo con el descenso, y para volver a pensar en grande. Junto al Yacaré la base se puede apoyar en Yonathan Cabral, Pablo De Blasis, Matías Abaldo, Benjamín Domínguez, Eric Ramírez y lo que pueda demostrar el uruguayo Juan Pintado.
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