En sus primeros pasos previo al estrellato total, Los Piojos tuvieron su conexión con Gimnasia en recitales que los hinchas recordaron en el marco de su regreso.
Los Piojos nacieron en una etapa donde el rock nacional y el fútbol estrechaban lazos como pocas veces se ha visto. La conexión con la pelota en sus letras, sumado al reconocimiento de Diego Maradona lo hacían aún más especial; y en sus pasos por La Plata, inevitablemente tuvieron contacto con Gimnasia, donde quedaron marcados a fuego en los fanáticos sus shows bajo el techo del Polideportivo Victor Nethol.
En el marco de su vuelta a los escenarios, con la particularidad de que será en la ciudad de las diagonales, en las redes sociales del Lobo hicieron eco de su regreso y los hinchas triperos aprovecharon para recordar los recitales que la banda brindó en las instalaciones de calle 4.
Los Piojos, la banda que lideraba Andrés Ciro Martínez, separados hace 15 años, vuelve a tocar y eligieron La Plata para el regreso.
Los Piojos, la banda ícono del rock nacional, volverá a reunirse y se presentarán al menos dos veces en el Estadio Único de La Plata.
"No te asustes si me río como un loco, es necesario que a veces sea así", escribieron en una publicación donde aparece Pablo de Blasis sonriendo a días de haber marcado el gol que hizo delirar a todo el Bosque para reafirmar su buen presente en el semestre.
Esta publicación disparó los recuerdos de cientos de triperos que aún conservan el fiel recuerdo de aquellas noches entre finales de los 90 y principios de los 2000 en que las banderas de los piojosos ocupaban todas las paredes de un Polideportivo que era un hervidero en el que no cabía ni un alfiler.
El recinto mens sana por aquellos tiempos alojaba no menos de 5.000 personas y quienes presenciaban esos shows se animaban a decir que se sentía como si hubiera el doble de asistencia.
Junto al de Ferro, Racing, Argentino de Quilmes y el Obras Sanitarias, el de Gimnasia era uno de los polideportivos elegidos por la banda de El Palomar para realizar sus giras por aquel entonces con discos cumbres como "Tercer Arco" (1996 - 1997), "Azul" (1998 - 1999) o "Verde Paisaje al Inferno" (2000 - 2001).
Con todas sus noches sold out, a calle 4 asistían muchos platenses entre los que se mezclaban los primeros fanáticos que se tomaban el micro desde Capital Federal para seguir a los músicos que habían bendecido los integrantes de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota en 1990, cuando Skay Beillinson asistía a sus shows y los elogiaba en los medios gráficos.
Su debut en el Víctor Nethol fue en 1997 con dos noches a todo trapo. Así volvieron a presentarse cuatro veces más entre el 98 y 99. Recién para el 2001 tuvieron que sumar una noche más, su tercera, por la enorme demanda de fanáticos que se sumaban en la ciudad.
Con el éxito de esa etapa que los llevó a pasar de teatros y microestadios a festivales de alto calibre como el Cosquín Rock y estadios de fútbol como el de Huracán y Atlánta, los recitales en el recinto de calle 4 ya les quedaba chico.
Aún así regresaron en 2002 con seis noches donde los ingresos rebalsaban del público que llegaba de todas partes de la Provincia y que no querían perderse ni un solo show de la banda.
Tal fue el éxito de los recitales en La Plata que en su disco en vivo, "Huracanes en luna plateada", registraron 19 canciones donde aparecen los shows del estadio de Huracán, en el Luna Park, en Rosario, en Neuquén, en Córdoba, en Mendoza y, claro, en el Polideportivo de Gimnasia, donde