La trágica muerte de un nadador uruguayo de 56 años que intentaba cruzar a nado el Río de la Plata todavía genera conmoción no solo en la región sino también en el vecino país. El hombre, un cirujano oriundo de la ciudad de Salto, tuvo que ser asistido de urgencia cuando llegaba a su destino y, pese al esfuerzo del equipo médico que lo acompañó durante toda la travesía, no resistió y finalmente fue declarado muerto en el Hospital Municipal de Punta Lara, en la vecina ciudad de Ensenada.
En medio del dolor de sus familiares, amigos y colegas, poco a poco comienzan a conocerse detalles sobre qué fue lo que sucedió. Gonzalo Leal había partido a las 4.30 del jueves desde la playa de Colonia del Sacramento, escoltado por una embarcación de primeros auxilios y otra en la que lo acompañaba uno de sus cuatro hijos.
Alrededor de las 19, unas 15 horas después de iniciado el cruce y cuando quedaban unos pocos metros para alcanzar la orilla, quienes seguían a Leal comenzaron a notar que su nado era errático y de inmediato lo subieron a la lancha de auxilio para asistirlo. Según se supo, el médico y nadador aficionado se descompensó mientras nadaba y sufrió un paro cardíaco.
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Gonzalo Leal, el nadador fallecido en el Río de la Palta, era médico, padre de 4 hijos y tenía 56 años.
"Lo subieron a la embarcación de asistencia observando que presentaba los labios morados y notaron que no tenía signos vitales, iniciando maniobras de RCP hasta la orilla del Río de la Plata, lugar donde se lo traslada en vehículo de guardavidas hasta el Hospital Municipal, constatándose el deceso", informaron tras lo ocurrido las autoridades a cargo del caso.
Según precisaron los investigadores, el nadador se había realizado los estudios médicos pertinentes para poder realizar el cruce y estos habían arrojado que no tenía ningún problema de salud y estaba en condiciones de realizar el desafío de nadar 40 km para unir las costas uruguaya y argentina.
¿QUIÉN ERA EL NADADOR FALLECIDO?
Leal era oriundo de la ciudad uruguaya de Salto y en sus redes sociales se presentaba como "salteño, capellán, padre, esposo, médico cirujano, presidente de Salto Nuevo FC y (del) Movimiento Naranja", que lideraba en su ciudad.
"Hola, les cuento que voy a hacer el intento de cruzar el Río de la Plata nadando. La ventana es del 1 al 10 de febrero. Estoy esperando que me habiliten según tiempo, marea y permiso de Prefectura. Gracias a todos lo que han ayudado a que me pueda sacar las ganas", había contado en su cuenta de Instagram hacía apenas 4 días. El cirujano esperaba completar el trayecto a cien años del primer cruce a nado del Río de la Plata, tiempo en el que solo 45 personas recibieron la autorización para encarar este enorme desafío que, en su caso, tristemente terminó en tragedia.
Ese último posteo agregaba una frase que cobra otros sentido a partir del fatídico desenlace y puede ser leído como una despedida. En el escrito saludaba a sus compañeros de nado de toda la vida, a los de "ahora" y "a los de cuando éramos niños, también a los del futuro" y terminaba con un agradecimiento: "A mis padres que me llevaron a nadar cuando era muy chico. Y sobre todo a mi madre que sé que me va estar mirando y alentando desde el cielo como siempre lo hizo".