El fútbol de Italia se enfrenta a un nuevo escándalo por apuestas ilegales, esta vez con la participación de varios futbolistas de la Serie A. Entre los nombres más resonantes se encuentran dos jugadores de la Selección argentina campeona del mundo, quienes habrían estado involucrados en una red clandestina de apuestas deportivas.
De acuerdo al diario Corriere della Sera, la fiscalía de Milán detectó una estructura integrada por doce jugadores y varios intermediarios, que operaba entre diciembre de 2021 y octubre de 2023. La causa se inició a partir de la incautación de los teléfonos de Sandro Tonali y Nicolò Fagioli, quienes ya fueron sancionados el año pasado por hechos similares, con penas de inhabilitación de diez y siete meses respectivamente.
Las autoridades descubrieron que los futbolistas transferían importantes sumas de dinero a dos intermediarios, Tommaso De Giacomo y Patrick Fizzera, quienes operaban en plataformas de apuestas no autorizadas. Estos intermediarios mantenían vínculos con tres administradores de una joyería en Milán, que simulaban la venta de relojes de lujo para saldar las deudas de juego.
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La caravana de la Selección argentina en el país.
La implicancia de los campeones del mundo con la Selección argentina
Tanto Ángel Di María como Leandro Paredes, que compartieron equipo en la Juventus durante su paso por la Serie A, fueron mencionados en el expediente por sus vínculos con esta red. La investigación aclaró que las apuestas no tenían relación con partidos propios, sino que se trataban de juegos sobre otros deportes.
El móvil del delito, según los investigadores, era “matar el tiempo libre durante las concentraciones”. Aunque los futbolistas no estarían expuestos a consecuencias penales, podrían enfrentar sanciones deportivas por parte de la FIFA, debido a su reglamento sobre participación en apuestas.