En la recta final hacia las PASO, la precandidata a intendenta del PTS y la Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda y los Trabajadores Unidad (FIT-U), Luana Simioni, pasó por el estudio de 0221.com.ar para hablar de las propuestas de la izquierda para La Plata y de las expectativas para el próximo domingo. "Convocamos al electorado a que canalice la bronca por izquierda", dijo la dirigente y arremetió contra el líder y precandidato de La Libertad Avanza, Javier Milei. También aseguró que si se redujera la jornada laboral, como propone el binomio presidencial Myriam Bregman - Nicolás Del Caño, se generarían "22 mil puestos de trabajo genuino" en la región del Gran La Plata.
-¿Cuál es el problema más urgente que hay que atender en la ciudad?
-Podríamos decir que la desigualdad profunda y eso engloba a muchos temas. Es muy difícil pensar en la ciudad que tiene récord de barrios precarios y precarios, si el problema principal es ése, el acceso a la vivienda que es negado para muchísimas familias, el acceso a los servicios básicos de los que carecen la mayoría de los barrios populares; estamos hablando de recolección de residuos, asfalto, de la posibilidad de acceder a la salud porque no hay unidades sanitarias, o de la precarización laboral: 7 de cada 10 jóvenes de nuestra ciudad trabaja de manera informal sin ningún derecho. Creemos que hacen a un conjunto de problemas de una ciudad profundamente desigual que no la inventó (Julio) Garro, pero la profundizó de las gestiones anteriores que han gobernado -y en eso tienen un signo común- en favor de un puñado de empresarios, del transporte, de las constructoras e inmobiliarias, mientras la realidad de las mayorías populares se fue empobreciendo e empeorando cada día más.
-¿Cuál es la principal medida que proponen para afrontar esta desigualdad?
Tenemos una propuesta que estamos haciendo a nivel nacional con nuestros compañeros Myriam Bregman y Nico del Caño que es la reducción de la jornada laboral a 6 horas 5 días. Esto permitiría generar trabajo genuino que nos parece que es el motor de los problemas, no se puede sostener un alquiler, pensar en el derecho al futuro como es el slogan del actual gobernador Axel Kicillof o como quieren imponer en la ciudad, "La ciudad que queremos". si no hay trabajo con derechos, si no hay posibilidad de trabajar con un salario que alcance para vivir y, a partir de ahí, planificar el resto de la vida. Nuestra propuesta de reducción de la jornada laboral, si se aplicara solo a las principales empresas de la región, permitiría generar 22.000 puestos de trabajo genuino, por supuesto afectando las enormes ganancias de rentabilidad que han tenido estas empresas que ganaron siempre con pandemia, con sequía, con guerra. Nos quieren hacer creer que es imposible, que no se puede combatir esta precarización y el desempleo, nosotros decimos que sí, pero para eso hay que invertir las prioridades.
-¿Qué te diferencia del precandidato del Polo Obrero, que también va dentro del Frente de Izquierda? ¿Por qué el electorado platense tendría que votarte a vos y no a Daniel Rapanelli?
-Nos gusta hablar de por qué nos tendrían que votar a nosotros y no porqué no a un compañero con el que vamos a hacer campaña común, integrando nuestra lista hacia octubre. El Frente de Izquierda es una de las coaliciones más longevas, que más ha persistido en el escenario político nacional. A nosotros nos parece que esto es un dato importante porque lo estamos sosteniendo desde hace 12 años. A veces dirimimos las candidaturas en internas, como sucedió en 2015, en las elecciones pasadas también, otras veces hemos ido en listas comunes. A nosotros nos parece que, tanto Myriam Bregman como Nico del Caño, y en mi caso en la ciudad de La Plata, intentamos expresar una izquierda que está acompañando permanentemente cada lucha, una lucha emblemática como fue la del Movimiento de Mujeres y ya no existe en la agenda de ningún candidato pese a que la Ciudad de La Plata es capital de los femicidios. Pero también somos una izquierda que acompaña la lucha de las y los trabajadores en todo el país: lo vimos en Jujuy con una reforma constitucional antiderechos, allí estaban nuestros compañeros acompañando esa pelea. Creemos que eso es una característica de nuestra lista, decimos lo que hacemos.
-En el 2021 estuvieron a punto de entrar al Concejo Deliberante, ¿cuál es el desafío para estas elecciones?
-En el 2021 faltó muy poquito, unas décimas para que podamos acceder al Concejo Deliberante y es un desafío que seguramente vamos a ponernos hacia octubre, pero ahora en estas elecciones nuestra perspectiva es convocar al electorado que se siente desencantado, defraudado, porque gobernaron todos y estamos con más niveles de pobreza, con más precarización, que la bronca no la canalice en personajes que gritando un poquito y despeinándose el jopo, como hace Javier Milei, quiere llevarse y canalizar ese descontento, que es genuino y que lo entendemos y que es lo que nos encontramos también en las recorridas. Esa bronca queremos que se canalice por izquierda, es decir con una coalición como el Frente de Izquierda, que va a estar presente acompañando cada reclamo.
-¿Temen que Milei les reste votos del electorado joven?
-Eso todavía está por verse, en las elecciones anticipadas que hubo en las provincias, más bien hizo sapo con sus candidatos y con algunos se jugó fuertemente, Ricardo Bussi en Tucumán, o Martín Menem en La Rioja, con apellidos pesados y de una tradición muy derechista; de anticasta y de novedoso no tienen nada, y no le fue muy bien. Todavía está por verse qué es el fenómeno Milei. Sí nos preocupa que haya, sobre todo, un sector de la juventud que desinteresado por la política vea en Milei algo distinto sin profundizar mucho, cuando es parte de las viejas recetas neoliberales. Propone más ajuste, privatizar la educación, cosas delirantes, llega a decir que el que es pobre y no llega a fin de mes venda un órgano, barbaridades así, pero tiene una impronta que parece antisistema, pero que en realidad profundamente refuerza lo peor de este sistema. Así que, más que temer, lo que queremos es militar activamente para que no sean esos los personajes que se refuercen en el marco de un hastío y un hartazgo con la política tradicional que ha desencantado mucho al electorado. Por eso, nuestro esfuerzo por recorrer y conversar, sobre todo con la juventud, para poder convencerlos que la verdadera salida es por izquierda.
-Hay una preocupación en el oficialismo por la posibilidad de que haya una baja participación en estas PASO. ¿Ustedes comparten ese temor?
-Más bien entendemos que es parte de un hartazgo generalizado. Se ha utilizado la no participación, el voto en blanco, como un voto rechazo. Un rechazo a un sistema político que ha prometido y ha hecho todo lo contrario. Venimos de una experiencia muy reciente con el macrismo que hundió al país y a la provincia, que nos llevó de vuelta al Fondo Monetario Internacional. Luego vino Alberto Fernández diciendo "limpiá la parrilla que vuelve el asado", y lo que hubo es más ajuste, más precarización. Y hoy el candidato del oficialismo es Sergio Massa, el ministro de Economía de los tres dígitos de inflación. Y del otro lado tenemos candidatos derechistas que prometen solo mano dura y se miran en el espejo de la represión de Gerardo Morales en Jujuy. Frente a eso, es entendible que una de las expresiones del desencanto y del malestar sea no participar, no ir a votar. Nosotros decimos que no se queden masticando bronca en su casa, que el verdadero rechazo para castigar a este régimen político es votar a una izquierda que va a estar presente en cada lucha, en cada pelea, y que vamos a estar también siendo una voz de todo ese malestar y toda esa bronca para plantear que hay una alternativa. Es difícil, pero hay que pelearla para que se inviertan las prioridades y no seamos la clase trabajadora la que pague las consecuencias del ajuste de los grandes partidos tradicionales.
