"El delito ya está probado en primera instancia, ya hay condena, ahora hay que determinar las responsabilidades políticas". En 18 palabras un experimentado investigador judicial trazó los esbozos de la futura causa penal que tiene en la mira al exintendente de La Plata, Pablo Bruera (PJ), y su exsocio político, Jorge Campanaro (UCR), en el marco de la nueva investigación que se ordenó abrir tras la condena por "asociación ilícita" a su hermano Mariano.
Tal como informó en varias oportunidades este medio, tres jueces de La Plata dispusieron la reapertura de la investigación por presuntos pagos de sobornos y asociación ilícita en la Municipalidad local durante el gobierno del ex Jefe Comunal. La medida se conoció luego de la sentencia que formó parte de la resolución en la que fue condenado en primera instancia Mariano Bruera a una pena de seis años de prisión y diez años de inhabilitación para el ejercicio de la función pública.
La causa se inició por la denuncia del empresario Guillermo Andreau, quien intentó rezonificar tierras para volcarlas al mercado inmobiliarios (para ser vendidas a beneficiarios del exitoso plan de viviendas Procrear del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner), pero recibió un pedido de sobornos para que el trámite se efectivice. Fue un escándalo.
De acuerdo con la investigación del fiscal Jorge Paolini, los terrenos de Andreau eran considerados "reserva urbana" y, por lo tanto, se impedía el loteo en parcelas más pequeñas. Sin embargo, el Código de Ordenamiento Urbano (COU) redactado durante la gestión del exintendente Pablo Bruera contemplaba que las parcelas de más de una hectárea se podían dividir por decreto sin pasar por el Concejo Deliberante y fue en ese marco que el empresario recibió la propuesta de lotear sus terrenos a cambio de una importante suma de dinero.
"Yo había terminado los trámites de rezonificación, esa noche estaba con amigos tomando café en Bliss", la tradicional cafetería de City Bell, "y recibo un llamado telefónico, salgo para hablar y cuando regreso les comento 'estos bandidos me quieren coimear' (para que se aprueben los expedientes de rezonificación), a lo que el martillero Santiago Mamberto me aconseja que radique la denuncia, así empezó todo", recordó el denunciante.
"Cuando fui a denunciar, el fiscal (Jorge) Paolini me dijo 'todos sabemos que en La Plata hay mucha corrupción, pero nadie se anima a denunciarla', y enseguida me dijo si aceptaba que me intervengan el teléfono y acepté. Yo nunca pensé que los iba a meter presos a todos, yo lo único que buscaba era que frenaran con los pedidos de coimas", aseguró Andreau.
Con la denuncia radicada, siguió los consejos del fiscal, quien le dijo "hablá por teléfono con todos" y así se obtuvieron las escuchas telefónicas. En ese derrotero de relaciones para lograr que avance la investigación, lo fue a ver al exfuncionario Jorge Campanaro. Cuando le comentó la situación, escuchó lo que se imaginaba. Según declaró bajo promesa de decir la verdad, sostuvo que Campanaro le respondió: "Esto es una colaboración que hay que hacer, dejame ver que lo voy a hablar con Pablo", en relación al exintendente Pablo Bruera, hermano de Mariano, uno de los acusados.
En otro pasaje de su relato, Andreau recordó otra promesa de Campanaro, quien le dijo según sus dichos: "Ahora Pablo (Bruera) está ocupado, dejame hablar con él para ver qué quita te podemos hacer". Además, aseguró que el exfuncionario municipal tuvo un crecimiento exponencial en muy poco tiempo de su patrimonio personal y rememoró que existieron quejas por construir edificios sin tener las habilitaciones aprobadas. Sobre el pedido de coimas que recibió, dijo: "Me cuesta creer que todo termine en Campanaro", en referencia a que tiene la sospecha personal que la mayor parte de la presunta recaudación de sobornos terminaba en manos del entonces intendente.
Por estos dichos es que la fiscal solicitó que se extraiga copia del testimonio y se remita a la fiscalía en turno para que se abra una investigación sobre el exconcejal radical, abogado y empresario Campanaro, quien fue uno de los fundadores del Frente Renovador Platense con el que Pablo Bruera llegó a la intendencia de La Plata en el año 2007 y se despidió de ella en diciembre de 2015.