El clásico platense volvió a quedarse en manos de Gimnasia tras 13 años de arrastrar una mala racha histórica. En este sentido, las últimas generaciones han cargado con un enorme peso de no haber podido conseguir ver al equipo de sus amores triunfar en los partidos frente al rival de toda la vida, pero tras el penal marcado por Cristian Tarragona aquella suerte de maleficio se quebró y el pueblo tripero volvió a festejar.
Más allá de la alegría posterior, el sufrimiento previo a que el delantero de vuelta el marcador desde los doce pasos será bien recordado por todos los hinchas, que esperaban con ansias aquel momento. Uno de los que más padeció el penal de la victoria fue un pequeño que se lo notó muy nervioso cuando su equipo estaba a punto de pasar al frente en el partido.
Un plateista estuvo habido de reflejos y sacó su teléfono del bolsillo para, además de grabar el penal de Tarragona, capturar el momento de nerviosismo que estaba pasando el nene, que se tapaba los ojos, lagrimeaba y se daba la vuelta para no ver cómo pateaba el penal el nueve tripero.
El camarógrafo no tuvo mejor idea que subir a las redes sociales el video seguido del siguiente texto: "Penal y el pibito ya está enfermo de pasión". Comentarios como "esto es Gimnasia", "yo fui el pibito" o "que bien esa educación", fueron algunos de los comentarios que surgieron en la publicación que tuvo cientos de interacciones en minutos.
