La escritora oriunda de La Plata, Cielo Latini, se volvió tendencia en las redes sociales luego de que cientos de usuarios repudiaran una publicación que realizó en las últimas horas. Cielo había respondido a una consigna que posteó una persona y de la que muchos estaban participando, pero la respuesta fue tan polémica para la opinión de algunos que salieron a acusarla, entre otra cosas, por "introducir a las personas a los Transtornos de Conducta Alimentaria (TCA)".
El tuit en cuestión decía lo siguiente: "Hace cuatro años dejé las harinas al 100%, me hice vegana (soy veggie desde los 20), dejé de contactarme con gente que me vibra mal, no veo noticieros/portales, yoga todos los días de mi vida llueva o truene, medito y practico la gratitud. Jamás fui tan feliz", fue la respuesta de Cielo a la pregunta genérica de otro usuario que proponía: "¿Hábitos que te cambiaron la vida para bien?".
El autor de la pregunta que derivó en la polémica de Latini es Felipe Mendiguren, un argentino radicado en Valencia que desde hace tiempo trabaja con el modelo educativo Método Montessori, una práctica educativa difundida en Argentina desde hace años.
Poco a poco, la escritora comenzó a recibir varias respuestas negativas de personas que la acusan, por ejemplo, de introducir "a toda una generación de nenas al mundo de los TCA", como dijo una usuaria. "Que grande Cielo Latini vibrando alto después de hacer anoréxica a media generación", replicó otra persona más, en modo sarcástico.
Ante la catarata de críticas, Cielo respondió a todos los mensajes contra ella. "Las personas que hablan mierda lo hacen porque están llenos de mierda (¿quién no ha pasado por ahí alguna vez?). Ocúpense de sus vidas, lean cosas lindas, vean cosas lindas, ocúpense de mejorar su amor por ustedes mismos. Fijate cómo estás usando tu vida, tu cuerpo, tu alma. Estás perdiendo tiempo hablando mal otro, tiempo que podrías estar usando para estudiar algo, para leer un buen libro, para ver Netflix, no sé. Hay tanto por hacer. Gestionen mejor su tiempo", replicó, aunque los insultos siguieron lloviendo en las redes.
