domingo 13 de julio de 2025

La vida después del coronavirus: ¿cuáles son las secuelas en los pacientes recuperados?

Expertos advirtieron que los síntomas residuales del virus podrían persistir en los pacientes durante meses, años o de por vida.

--:--

Los diversos estudios realizados en pacientes recuperadores de COVID-19 detallaron posibles consecuencias que pueden sufrir las personas luego de curarse de la enfermedad. En la investigación se destaca que los problemas se agravan en aquellos que estuvieron en terapia intensiva y con respirador.

El primero de los problemas que puede sufrir un paciente recuperado es la dificultad para respirar. Sin dudas se trata de uno los inconvenientes físicos más importantes y se debe al daño en los pulmones, el corazón o de coagulación. Una posible solución es utilizar una cánula nasal de oxigeno mientras continúan con la recuperación en sus casas.

Lee además

Algunos tienen una tos intermitente que no cesa y que dificulta la respiración”, mencionó Zijian Chen, director médico del nuevo Centro para Cuidados Pos-COVID-19 del Sistema de Salud Monte Sinaí.

El grupo de pacientes que participó de la investigación también manifestó dificultades para tragar o hablar en voz alta. Este problema se detectó en pacientes que estuvieron conectados a respiradores. Por lo general suele ser una consecuencia temporal por las lesiones o la inflamación que provoca el tubo del respirador en las cuerdas vocales.

En cuanto a la debilidad muscular, la misma suele aparecer después de haber estado tanto tiempo acostados en la cama durante la internación. Esto puede incurrir en problemas para caminar, subir escaleras o levantar objetos. En esa línea también aparece el cansancio o la dificultad para concentrarse en alguna actividad. “Tenemos pacientes que vienen y nos dicen: ‘No puedo concentrarme en el trabajo. Ya me recuperé, no tengo problemas para respirar, no siento dolor en el pecho, pero no puedo regresar a trabajar porque no puedo concentrarme’”, comentó Chen, según el informe publicado por The New York Times.

Los médicos advierten que es común que el paciente tenga pesadillas, depresión y ansiedad. Este fenómeno es conocido como “síndrome posterior a cuidados intensivos”, que puede incluir síntomas físicos, cognitivos y emocionales.

El delirio hospitalario forma parte del síndrome posterior a cuidados intensivos, los pacientes pueden presentar alucinaciones paranoicas, confusión y ansiedad. Una de las causas puede ser el haber pasado varios días bajo los efectos de sedantes, según un estudio realizado por un equipo del Centro Médico de la Universidad Vanderbilt.

Al ser consultados por las soluciones a estos problemas, los expertos indicaron que la medicación puede ayudar con los problemas cardíacos o coágulos en la sangre, con algunos problemas como los físicos, recomiendan realizar ejercicios de respiración, y terapia física para ayudar a restaurar la fuerza muscular, el movimiento y la flexibilidad.

Para la capacidad y concentración en realizar las tareas diarias, los especialistas recomendaron la terapia ocupacional, mientras que la terapia del lenguaje puede ayudar con la deglución y los problemas de las cuerdas vocales.

Dejá tu comentario

Las más leídas

Te puede interesar