El ministro de Salud de la Nación Ginés González García; el de la Ciudad, Fernán Quirós; y el de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán; se reunieron este lunes para evaluar el avance del coronavirus en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Si bien sostuvieron que el objetivo del encuentro fue diagnosticar la evolución de la pandemia en la región tras el reciente incremento de casos, también anunciaron cambios en el análisis de los datos y mayores controles en el transporte público.
"Trabajamos en buscar una metodología común para tener todos los datos. Vamos a tratar de manejar la información como una unidad, que sea similar en todo el AMBA", detalló González García luego de la reunión y subrayó la importancia de tener acceso a "información oportuna y que esté consolidada", ya que es "parte del sustento de la toma de decisiones".
Según aclaró Ginés González García no se trata de más restricciones sino de un mayor control de la situación, por ejemplo a través de la creación de una sala de situación del área, que les permitirá trabajar de forma conjunta con los mismos indicadores y estadísticas. También coincidieron en difundir los datos del AMBA de manera global, lo cual evitaría las comparaciones entre la Ciudad y el Gran Buenos Aires.
En el encuentro los ministros también acordaron reforzar el sistema para la búsqueda de casos sospechosos y el aislamiento de contactos estrechos, que se realizará manera "más proactiva". Otro tema de debate fue la situación de los medios de transporte, determinantes en la propagación del virus. En ese sentido, las autoridades sanitarias comunicaron que habrá mayor monitoreo y controles en todos los pasos y accesos interjurisdiccionales. "Más circulación significa más riesgo de contagio", apuntó al respecto el ministro de Salud de la Nación.
Con respecto a las salidas recreativas en la Ciudad, que habilitan a los porteños a caminar, correr y andar en bicicleta entre las 20 y las 8 de la mañana, García dijo: "No me me preocupan particularmente, pero entiendo que es una imagen no demasiado buena". El futuro de la medida sigue en evaluación.
Consultado por la prensa, el viceministro de Salud bonaerense Nicolás Kreplak advirtió que "la situación es muy complicada" y que los controles anunciados podrían no ser suficientes. "Cuando los casos aumentan de la forma en la que lo están haciendo nos da que (el sistema de salud) se va a saturar. Será más o menos en 40 días, depende de cómo se mueva la curva", aventuró.
Frente a ese escenario, defendió la decisión de unificar los indicadores y la comunicación entre la Ciudad y la provincia de Buenos Aires, y sostuvo que "es necesario reducir la tasa de contagios", aunque prefirió no opinar sobre la forma en la que esto último podría implementarse. "Esta definición la tienen que tomar el Presidente, el gobernador y el jefe de gobierno de la Ciudad", concluyó.