Era el año 2005 y faltaban horas para que la Selección argentina jugara el encuentro que podía definir su lugar en la Copa del Mundo de Alemania 2006.
Era el año 2005 y faltaban horas para que la Selección argentina jugara el encuentro que podía definir su lugar en la Copa del Mundo de Alemania 2006.
“Ese partido fue el que nos aseguró la clasificación al Mundial. Fue un partido muy emotivo”, recordó Lucho González, en diálogo con TyC Sports, haciendo referencia al emblemático duelo con Brasil, en el Monumental. En ese marco, el ex hombre de River recordó una divertida anécdota con Javier Mascherano.

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El DT de Estudiantes, Eduardo Domínguez, no habló con la prensa tras la derrota, y luego de haber tenido un mano a mano con Marcos Angeleri.
Por aquellos tiempos, ambos futbolistas eran compañeros de habitación en las concentraciones y la noche previa al encuentro, no podían dormir. Fue por eso que un momento decidieron prender la luz y empezar a hablar del partido.
“Yo me acuerdo que le dije, ‘me imagino que voy a tener que marcar a Roberto Carlos y Zé Roberto que van a estar pasando por ahí y no sé qué hacer”, contó Lucho sobre el diálogo con Masche.
Inmediatamente, ante ese planteo del actual hombre del Paranaense, Javier Mascherano le contestó: “Y yo que tengo que marcar a Kaká, Ronaldinho, Adriano y Robinho…”. Ambos empezaron a reír, luego del comentario del Jefecito.
Según lo expresado por Lucho González, todo terminó cuando ingresó repentinamente a la habitación el Kily González, quien con una graciosa frase los tranquilizó e hizo que volvieran a intentar dormir.
El final y lo sucedido aquel partido es más que conocido. Una contundente victoria por 3 a 1 le dio la clasificación a la Argentina para el Mundial de Alemania 2006, con un Juan Román Riquelme en un nivel superlativo, que de la mano de José Pékerman supo brillar aún más.