El esperado juicio al expolicía platense Luján Martínez, acusado de intentar matar a su expareja; quedó en suspenso ya que el fiscal Lucas Domsky se excusó de realizar el debate porque con el acusado trabajaron en varias investigaciones cuando el funcionario judicial era instructor. El letrado consideró que en este caso en particular no cuenta con la objetividad necesaria ya que existe un conocimiento previo y hubo una relación laboral con el sospechoso. El planteo de apartamiento fue avalado por el juez Claudio Bernard quien deberá designar una nueva fecha de debate una vez que se asigne un nuevo fiscal al caso.
Con esta medida Domsky también despejó un posible planteo de nulidad de la defensa y evitó que su actuación pueda generar que el caso quedara impune, ya que una persona no puede ser juzgada dos veces por el mismo delito, principio jurídico conocido como non bis in idem. Martínez es asistido por la defensora oficial Gladys López.
Martínez fue procesado por el intento de femicidio de Nadia Barrera. El exefectivo de la bonaerense había sido denunciado en otras 26 causas por violencia de género. En 2008 fue juzgado por el asesinato de Mauro "Beto" Martínez, uno de los principales testigos en el juicio por la desaparición de Miguel Bru.
Luján Martínez tenía una perimetral, sin embargo el 5 de junio de 2017 entró en la casa donde había convivido con Nadia, en la localidad de Gonnet y la apuñaló seis veces delante de los dos hijos de ambos, según la hipótesis fiscal. No sirvieron para impedir el ataque ni la restricción ni el botón antipánico que le habían dado a la joven después de denunciarlo ocho veces desde 2014.
Un relevamiento realizado por la Secretaría de Género de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata evidenció que el expolicía estaba libre a pesar de tener 26 causas judiciales abiertas en su contra, la mayoría por violencia de género, iniciadas desde 1998 a partir de las denuncias de Nadia y otras tres exparejas suyas.
A mitad de 2016 una de las causas por lesiones y amenazas iniciadas por Nadia en 2015, fue elevada a juicio pero se acordó la pena en un juicio abreviado: Martínez fue condenado a tres años de prisión de ejecución condicional, es decir, no iría preso. Se le otorgó la excarcelación y así recuperó su libertad.
ABSUELTO
En 2008 Martínez fue juzgado junto al expolicía Ismael Gauna por el asesinato de uno de los testigos clave de la desaparición de Miguel Bru, Mauro Martínez. Beto fue testigo de la desaparición del estudiante de periodismo en agosto de 1993. Su testimonio fue clave para confirmar que Miguel estuvo en la comisaría Novena y que allí fue torturado hasta la muerte. Luego de declarar Beto comenzó a ser perseguido por la policía y en junio de 2002 fue fusilado por Gauna y Martínez. En el juicio contra los policías, tanto para la Fiscalía como para el particular damnificado –donde la familia fue representada por los abogados de la Asociación Civil Miguel Bru (AMB)– quedó claro que la víctima no opuso resistencia cuando los policías lo detuvieron, y que fue esposado y posteriormente ejecutado de un tiro en el estómago el 21 de junio de 2002 en la puerta de la casa donde vivía en pleno mediodía.
El fiscal consideró un agravante que Mauro haya estado esposado al recibir el disparo que le dio muerte, pidió 20 años de prisión por homicidio simple. Los abogados de la AMB solicitaron perpetua para ambos imputados. Sin embargo, el Tribunal Oral Criminal I de La Plata, integrado entonces por Samuel Saraví Paz, Patricia de la Serna y Guillemo Labombarda, absolvió a los agentes al considerar que actuaron en legítima defensa.
