El hombre se desempeña como parquero en la localidad de Etcheverry, una zona rural donde se presume habría tenido contacto con roedores. Tras comenzar a sentirse mal y no mejorar, su familia decidió trasladarlo al centro de salud ubicado en 1 y 70, donde posteriormente se confirmó que estaba afectado de hantavirus.
A raíz de esta afección, Coronel permaneció internado en terapia intensiva durante varias semanas hasta que este miércoles los médicos le dieron el alta.
Con más de veinte casos confirmados a lo largo de la última década, la presencia de hantavirus ya es considerada endémica en nuestra ciudad. Esto significa que al registrarse la presencia del roedor que transmite el virus (el ratón colilargo) y existir un medio infectado, basta que se den las condiciones necesarias para que aparezca nuevamente la enfermedad.
El hantavirus se transmite a los humanos a través de la orina, la saliva y las heces del ratón colilargo. Los síntomas son similares a los de la gripe, con fiebre, fuertes dolores musculares, vómitos y diarrea.