“Por lo menos la cuento”, dijo José Expósito, el ex párroco de 70 años que fue víctima de un ataque brutal en su casa de calle 62 entre 24 y 25. El hecho ocurrió alrededor de las 5.30 de la mañana del lunes, cuando dos delincuentes ingresaron a la casa y sorprendieron al cura en el momento en el que se encontraba por salir al patio.
Según el relato del padre José, uno de los ladrones se abalanzó sobre él rápidamente y el otro lo ayudó a terminar de inmovilizarlo, haciéndolo ingresar al domicilio. Aparentemente los sujetos eran jóvenes, estaban vestidos de negro y llevaban los rostros cubiertos.
“Gracias que tenía plata que había sacado del banco y otro poco que traje de España. Si no tenía plata me mataban”, resaltó Expósito en varias oportunidades, recordando que los delincuentes lo ataron con precintos a una silla para revolver cada rincón de su casa con tranquilidad. Todo hace indicar que los malvivientes habían acudido al lugar con un dato certero, ya que le pedían puntualmente “por la plata”.
Luego de hacerse con la suma de dinero de 500 mil pesos y varios objetos de valor, entre ellos una importante cadena de oro, siguieron amenazando a la víctima y golpeándolo, sin que esta pusiera algún tipo de oposición.

La información oficial indica que la pesadilla para el padre José duró unos 40 minutos aproximadamente. Una vez que terminaron con el robo, los dos delincuentes se retiraron por la parte delantera de la casa y aún no hay rastro alguno de ellos.
Las fuerzas policiales se encuentran trabajando en el caso y no descartan que los ladrones hayan sido los autores de otros robos efectuados en la zona, horas antes de ingresar a la casa del cura.