Los pasajeros de un micro de la línea 307 vivieron momentos de gran tensión en el céntrico cruce de 4 y 44, donde debieron evacuar el vehículo que comenzaba a incendiarse. Todo ocurrió cerca de las 16 de este viernes cuando, por razones que todavía se buscan determinar, comenzó a salir humo de la parte trasera del colectivo.
Los vecinos a bordo del micro fueron los que advirtieron el humo negro que salía por debajo del guardabarro de la goma trasera izquierda y avisaron al chofer. En cuestión de segundos, el conductor se detuvo, evacuó a la personas y, con un extinguidor, apagó el incipiente fuego.
A pesar del susto, afortunadamente, no hubo que lamentar grandes pérdidas ni heridos. Sin embargo, la unidad quedó inutilizable y los pasajeros debieron seguir a pie en medio de un clima de tensión y enojo.