Aunque el autocultivo de cannabis no está regulado a nivel nacional, distintas ONGs y organizaciones piden por un registro municipal de usuarios para resguardarse legalmente de las cada vez más frecuentes detenciones por este motivo. Por eso, luego de varios encuentros y reuniones entre activistas, concejales y funcionarios de la Municipalidad, se conversa sobre la implementación de un registro unificado de cultivadores cannábicos medicinales.
En él constarían el nombre completo del usuario, si practica el autocultivo y con qué finalidad utiliza la cosecha, algo que fue debatido arduamente porque una filtración de esa información podría causar más hostigamiento judicial. En diálogo con el portal Infoblancosobrenegro, la cultivadora del colectivo “La Semilla” Araceli Rea explicó que el documento "será muy importante porque permitirá tener un número real de usuarios”.
Con la mira puesta en la legalización del cultivo, más allá de si es "recreativo" o "medicinal", desde las ONG insisten en utilizar el término "terapéutico". "Una persona más que planta es una menos que compra a los narcos, por eso hay que empezar con el autocultivo", expresó Rea, que es abuela y cultiva en Villa Elisa.
En otros distritos de la provincia como Lamadrid o Vicente López ya funcionan registros del estilo. Nuclean un conjunto de normativas legales e incluyen un permiso puntual para que el Municipio se asocie a organismos científicos, como el INTA y el CONICET, con el objetivo de realizar cultivos comunitarios e investigación.
