"Cansada, agotada, sobre todo por no dormir bien en las noches. Enfrente no tenemos vecinos, solo arroyo y una placita, y estos días hubo mucha inseguridad. El lunes tuve que cargar la heladera y llevarla a lo de mi madre que vive en otro barrio, entre otras acciones", comentó Laura, una vecina de la zona norte de la ciudad que, como otros miles, sufrió el corte de luz generalizado a partir de la rotura de un cable de alta tensión de Edelap.
Es que Julián, su hijo de 15 años, pesa 40 kilos y padece parálisis cerebral, por lo que debe subir y bajar de su habitación en ascensor o, en este caso, a upa. "Durante estos días tuve que alzarlo y subir las escaleras. Venía el papá y nos ayudaba, yo después lo bajaba y subía la silla de ruedas... pero es complicado", aseguró la mujer en diálogo con TN.
"Por su patología Juli no es un nene flácido, sino que tiene movimientos involuntarios y mucha fuerza desmedida por su tono muscular. Así que no solo hay que alzarlo sino también contenerlo", explicó la mamá.
Y comentó que "antes de ayer a la noche (por el lunes) surgió una situación de angustia grande por no saber cuándo iba a volver. Pensamos: si no volvió en 3 podemos estar más tiempo todavía. No había respuestas, no hubo presencia del Estado; no hubo policía, defensa civil, nadie... ni hablar de Edelap, no vino nadie", advirtió.
Además aseguró que "todo lo que vimos lo vimos por las redes, los generadores traídos de Rosario, todo. En Edelap contestaba todo el tiempo el contestador automático. El barrio era una boca de lobo, me había quedado sin celular también. Ni gritar podíamos, si no te escucha nadie acá", aseguró la mujer, compungida.

Por su cuadro médico, Julián además debe comer alimentos procesados con Minipimer o batidora eléctrica, por lo que el corte de luz afectó también ese área. "Todos los días iba a lo de mi madre, cocinaba y traía las dos comidas procesadas para el día, además de ir a laburar y cumplir con la rutina de todos", manifestó Laura.
Su hijo no está cubierto por la Ley de electrodependientes ya que la misma solo rige para quienes tengan asistencia respiratoria, y no es el caso de Julián. Sin embargo, aseguró Laura, "con cuatro días sin luz... cualquiera es electrodependiente". Según supo 0221.com.ar, recién en la tarde de ayer se habría restablecido el servicio en el barrio de esta mamá y su hijo.