El caso sacudió a La Plata, que se movilizó de inmediato para dar con la nena de 11 años que había ido hasta una panadería de 122 y 77, pero nunca regresó. Tras varias horas de tensión y angustia, finalmente la adolescente se presentó en la casa de su papá y allí aseguró que había sido secuestrada y mantenida cautiva por al menos tres hombres armados, pero poco después, en la comisaría, terminó por desdecirse y reveló que se había ido por cuenta propia.
Con fotos y posteos en las redes sociales se dio a conocer la ausencia de la adolescente. Se indicaba que estaba perdida tras haber ido a realizar una compra a una panadería. Enseguida cientos de platenses comenzaron a compartir el caso y la noticia se volvió viral en las redes.
Horas después, luego de que la publicación copara historias de Instagram y muros de Facebook, la búsqueda se dio por finalizada y comenzó a circular una preocupante versión: en audios y con el posteo de un familiar directo de la menor, se dio cuenta de que la adolescente había sido secuestrada por tres hombre armados y encapuchados, a bordo de una Volkswagen Amarok.
De acuerdo con la versión oficial de la causa, a cargo del fiscal Juan Caniggia, Kiara llegó a la casa de su papá y allí le explicó que había sido secuestrada por tres hombres, drogada y retenida en una habitación que apenas había logrado ver, para luego volver a ser dormida por esos hombres y despertarse sola en un banco de la plaza San Martín. Fue allí que la joven se acercó a un kiosco y luego un taxista la llevó hasta la casa de su papá.
Alarmados por el relato de la joven, su papá fue hasta la comisaría donde, sin embargo, la menor terminó por desdecirse de lo ocurrido y revelando que el secuestro que mantuvo en vilo a la ciudad en realidad nunca ocurrió.
