La polémica por el destino de los feriantes que desde hace dos semanas no pueden acceder a la Plaza San Martín porque allí hay montado fuerte acordonamiento policial se profundizó esta semana con la presentación de un proyecto en el Concejo Deliberante a través del cual le piden al intendente Julio Garro que gestione que los más de 400 policía que bloquean ese espacio verde sean destinados a los barrios que más sufren la inseguridad.
La idea, que seguramente reinstalará la polémica, fue del kirchnerista Gastón Castagneto, el mismo edil que hace algunas semanas generó reacciones por otra iniciativa que impulsaba que la feria americana fuera habilitada hasta tanto los índices de pobreza en la ciudad no desciendan del 20%.
En este caso, el presidente del bloque Unidad Ciudadana presentó un proyecto de resolución que reclama “solicitar al Departamento Ejecutivo, a través del área que corresponda, efectúe los reclamos necesarios a fin de que los más de 400 efectivos policiales asignados al operativo de Plaza San Martín sean reasignados como refuerzo para la realización de patrullajes en Villa Elvira, Abasto, Gorina, El Peligro y Barrio Hipódromo a fin de prevenir el delito”.
Apunta contra el operativo permanente y conjunto que la Comuna encabeza junto a la policía bonaerense desde hace dos semana para evitar que los vendedores de ropa usada que se instalaban en Plaza San Martín vuelvan al lugar. En paralelo se abrió en Los Hornos (80 y 134) una feria para que puedan instalarse.
En los fundamentos, Castagneto dice que “en todos los barrios de la ciudad se reclama mayor presencia policial ante la creciente inseguridad que los azota, que pareciera aumentar de la mano de la pobreza y el desempleo”.
“Tanto el Gobierno Municipal como el Provincial tomaron la decisión política de asignar a más de 400 efectivos policiales al operativo montado contra la Feria Americana y Trueque que funciona en Plaza San Martín desde hace tiempo, donde personas jubiladas, desempleadas, o que no llegan a fin de mes salen a canjear o vender lo que les queda en su ropero para poder sobrevivir”, plantea Castagneto.

Por eso propuso que el Departamento Ejecutivo evalúe la posibilidad de “solicitar la reasignación de estos agentes a fin de reforzar el patrullaje en los barrios de Villa Elvira, Abasto, Gorina, El Peligro y Barrio Hipódromo “que están siendo arduamente afectados por constantes hechos delictivos, entendiendo que la policía está para combatir el crimen y el delito y no a la gente humilde que busca llevar el pan a sus hogares sin perjudicar a nadie”.