Falta menos de un mes para que el intendente Julio Garro asuma su segundo mandato al frente de la Municipalidad y eso lleva a que se profundice la evaluación de los cambios que aplicará. Más allá de los nombres, el jefe comunal tiene tomada la decisión de avanzar con la creación de nuevas áreas, y con la división y la fusión de otras ya existentes.
Entre los ajustes que están en carpeta aparecen el regreso de la Secretaría General, el área que fuera disuelta cuando se creó la Coordinación General de Gabinete, la superestructura que maneja Oscar Negrelli.
A eso se sumaría el desdoblamiento de la Secretaría de Planeamiento y Obras Públicas que hoy concentra Luis Barbier, uno de los funcionarios con origen peronista. Pero también la creación de nuevas áreas de trabajo para ejercer la contención social en el territorio y la fusión de la actual secretaría de Salud con el servicio de Emergencia SAME.
Claro que la reestructuración en el organigrama llegará con incorporaciones, salidas y enroques de nombres. En principio, como se viene informando, el primer criterio ordenador será el futuro de Negrelli, quien desde que asumió viene diciendo que acompañaría a Garro hasta el final del primer mandato.
Si eso se concreta el nombre que ganó terreno para reemplazarlo es el de Barbier, quien dejaría una doble vacante en caso de que efectivamente se divida el área que ocupa actualmente.
El deseo del intendente es apuntar a una gestión más técnica vinculada con la necesidad de monitorear el crecimiento planificado de la ciudad, con la llegada a los barrios más postergados en materia de servicios y de ordenar las zonas urbanizadas informalmente en la última década. Aparecen entonces dos nombres que hasta ahora tuvieron un bajo perfil en sus trabajos en las direcciones de Tierras y Planeamiento: el primero es el de Augusto Sciarreta, quien responde directamente a Garro y el segundo el de María Botta, una técnica que viene de la UNLP.
La idea de imprimir esa impronta a esas áreas dejaría afuera de las mismas a Barbier, incluso si Negrelli sigue en la Coordinación. Eso no implica su salida de Gobierno, más bien todo lo contrario. Garro lo quiere en algún área de gestión más política, por lo que el “plan B” será la Secretaría de Gobierno que abandonará Nelson Marino para asumir la banca en el Concejo Deliberante.
En efecto, en las últimas horas crecieron las chances que será él y no Darío Ganduglia el que va a cumplir la tarea legislativa para reemplazar a Ileana Cid en la presidencia del cuerpo quien volvería al Ejecitivo. El otro nombre que suena para presidir el cuerpo legisltvo es el de Javier Mor Roig.
Ese enroque con otra de las piezas claves de la estructura garrista tiene un objetivo preciso, al menos en los últimos apuntes del intendente: que Cid vuelva al Ejecutivo pero ahora a ocupar la Secretaría de Cultura si es que se confirma la salida de Gustavo Silva.
El que no iría a cumplir el rol legislativo dado por las urnas es Ganduglia. Al menos ahora esa es la idea del intendente y la razón es que quiere seguir teniéndolo en la estratégica Secretaría de Seguriudad.
Pero el de Cid no sería el único enroque con el Concejo Deliberante. El intendente también analiza la situación de Julieta Quintero, la dirigente que surgió de la Juventud PRO y hoy ocupa el doble rol de concejal y secretaria privada del jefe comunal. Garro quiere alguien propio trabajando en el área de Desarrollo Social y ella podría ser la elegida.
Si se concreta, ese desembarco afectará al titular del área, el radical Raúl Cadáa quien lejos de quedar afuera iría a ocupar la “recuperada” Secretaria General. Ese espacio quedó en un limbo después que lo dejara Javier Mor Roig para asumir como concejal.
Los supuestos que analiza el intendente incluyen la creación de otras áreas con las que reforzará la relación con el territorio, un aspecto que Garro considera clave para ejecutar política pura y dura el nuevo período. Esos espacios tienen destinatarios en el concejal peronista Fabián Lugli y el sindicato de Municipales que encabeza Darío Alfano. Ambos considerados “piezas claves” en el triunfo electoral del 27 de octubre.
También se contemplan las posibles incorporaciones al gabinete del actual concejal Julio Irurueta, posiblemente en alguna de las áreas económicas (la Agencia Platense de Recaudación es una alternativa) y del director del Registro de las Personas bonaerenses José “Pepe” Etchart, quien fuera tercer candidato a senador bonaerense.
De concretarse esos movimientos habría consecuencias en el Concejo Deliberante. Pasando en limpio: si Ileana Cid y Julieta Quintero vuelven al Ejecutivo se confirmaría la continuidad en la banca de Francesco Arriaga, quien en caso contrario debería dejarla porque se vence la licencia de la concejala titular Liliana Lucha, quien se había ido para trabajar en la campaña. También sería necesaria la asunción de Laura Barisone, quien está alineado con Barbier.
Del mismo modo, si se confirma que Ganduglia no asume su concejalía, se abriría un lugar para Sergio Sarlo, el Subsecretario de Coordinación de Centros Comunales, funcionario ligado a Marino.