“La verdad que no llevaba la cuenta, pero un poco me sorprende tener esta cantidad de encuentros y con esta edad”, declaró Lucas Rodríguez, luego de la práctica, al referirse sobre el número de veces que vistió la camiseta del León. De no mediar inconvenientes, Tití cumplirá el viernes un centenar de partidos en Estudiantes y ya no se lo considera “un pibe”, aunque tenga tan solo 21 años.
En este semestre, y de la mano del Chino Benítez, el habilidoso volante ha demostrado un gran nivel y es una pieza fundamental dentro del equipo, algo que vuelve meterlo en el radar de algunos clubes poderosos de la Argentina y también del exterior. “A pesar de los rumores de una salida, yo tengo la cabeza puesta en Estudiantes”, aseguró Tití al hablar de lo sucedido en el anterior mercado de pases y de las propuestas recibidas.
Al hablar de la actualidad del Pincha, Rodríguez resaltó que “la intensidad es la principal bandera que levanta el equipo”. En su nueva posición dentro de la cancha, ha demostrado un gran despliegue y ser muy útil: “Este puesto me favorece mucho para mi estilo de juego”. Junto con Fernando Zuqui, son los dos encargados de ejercer la primera presión sobre el rival, un trabajo importantísimo para el estilo que intenta imponer el Chino.
Pensando en lo que se le viene a Estudiantes, Lucas Rodríguez reconoció la dificultad que significa tener que enfrentarse a San Lorenzo en la Copa Argentina: “Todos dicen que juega mal, pero es muy efectivo”. Además, el joven del León confesó: “Al equipo se le hace más fácil cuando no toma la iniciativa del juego y es algo que debemos mejorar”.