La cátedra de Biología de la facultad de Medicina colocó una placa con el nombre de Emma Córdoba en el laboratorio de uso común. La joven de 26 años que fue asesinada en Punta Lara en julio de 2017 era ayudante de esa materia, por lo cual sus profesores decidieron recordarla de este modo.
Su asesino, Ariel Báez, espera el juicio en prisión preventiva. Según la fiscal de instrucción Virginia Bravo, aquel 8 de julio por la noche el hombre sometió a Emma y a una amiga, las violó y apuñaló y luego prendió fuego la casa; todo esto amenazándolas con un arma de fuego.
Báez enfrenta cargos por el delito de "privación ilegal de la libertad agravada, abuso sexual agravado, homicidio doblemente calificado por ensañamiento y por mediar violencia de género (uno consumado y otro en grado de tentativa) y por tenencia de estupefacientes para su comercialización".
A mediados de abril se confirmó que será un Tribunal colegiado y no un jurado popular quien juzgará al acusado.