Una sala del Tribunal de Casación bonaerense declaró la nulidad de la absolución con la que fue beneficiado el excabo de policía federal Alejandro Daniel “Chiquito” Santillán, quien fue investigado por el crimen del subcomisario Jorge Omar Gutiérrez, quien apareció asesinado en un vagón de trenes en la estación de La Plata.
Bajo la figura de “cosa juzgada írrita”, los jueces Jorge Borinski y Víctor Violini declararon la nulidad del juicio, ordenaron la realización de un nuevo debate y solicitaron al Fiscal General de La Plata que “se realice una investigación completa, imparcial y efectiva con el objeto de determinar la responsabilidad intelectual y material de todos los demás que hayan intervenido en la preparación y ejecución del homicidio, como en la eventual alteración o desaparición de elementos de prueba, favorecimiento personal de los anteriores u omisión de investigar y/o denunciar lo que correspondía investigar y/o denunciar”, según se desprende de la resolución a la que accedió 0221.com.ar.
Vecinos de Berazategui redujeron y pasearon desnudo por la ruta a un ladrón de Arturo Seguí que fue atrapado cuando intentaba robar en la zona.
Una mujer fue asaltada a punta de cuchillo en Villa Elvira. Le robaron el auto y sus pertenencias, y antes de huir le tiraron una Biblia que llevaba en su asiento.
El planteo ante Casación fue impulsado por el fiscal Martín Chiorazzi, luego del rechazo que había obtenido en la Cámara de Apelaciones de La Plata.
El 29 de agosto de 1994, el subcomisario Gutiérrez, de 41 años de edad, fue asesinado de un tiro en la nuca en el tren 4101 del ferrocarril Roca. En ese entonces trabajaba en la comisaría Segunda de Avellaneda y estaba investigando el tráfico de drogas y un depósito fiscal vinculado con uno de los mayores escándalos del menemismo, la “Aduana paralela”, una maniobra de contrabando por miles de millones de dólares.
Aquella noche, el subcomisario estaba yendo en tren hacia su casa y fue ejecutado a la altura de la estación Sarandí. Hubo dos testigos que vieron a Santillán y a Francisco Severo Mostajo juntos. Siempre fueron los principales sospechosos. También habrían presenciado cuando el cabo sacó un arma y mató a Gutiérrez. Los testigos luego se desdijeron en el juicio oral desarrollado en La Plata, en el año 1996.
El caso llegó al cine y quedó retratado en el film “G. Un crimen oficial”, que se estrenó en abril 2016.