Aproximadamente 330 platenses comenzaron el trámite de apostasía en lo que va del año. Se trata de un procedimiento administrativo para dejar de pertenecer a la Iglesia Católica, que comienza con la presentación de una carta consignando los datos personales y la fecha y lugar del bautismo y culmina con la anulación de dicho sacramento.
El movimiento de Apostasía Colectiva viene creciendo en La Plata al calor de la campaña por la Separación de la Iglesia y el Estado, representada con un pañuelo naranja. Soledad "Chola" Barczuk es una de las referentes de este espacio, que fomenta la presentación colectiva de cartas al Arzobispado para visibilizar la práctica y, de paso, evitar ciertas burocracias que suelen surgir cuando se inicia el trámite individualmente.
Más de 400 alumnos de diez escuelas de La Plata pagaron $12 millones para reservar un salón en Berisso cuya dueña suspendió el evento, sin reembolso.
La Municipalidad de la Plata informó que se incorporaron más vendedores al plan. En total son 589 los feriantes censados en ese espacio verde que está en refacción.
"Si el evento fuera masivo y realmente contundente, se notaría en la cantidad de bautizados que tiene la iglesia. Entendemos que es un mito el hecho de que la Iglesia cobre por cada bautizado, porque en realidad ya tiene asignado un montón de presupuestos anuales y subsidios a las escuelas católicas, sueldos de obispos, curas y capellanes. Es dinero de nuestros impuestos que va hacia la Iglesia, pero no es cierto que cobren dinero por cada bautizado. Por eso apostatar para nosotros es una actitud política", había explicado la mujer a 0221.com.ar en una de las primeras apostasías del año.
EL TRÁMITE
Quienes estén interesados en dejar de pertenecer a la Iglesia deben enviar una carta (pueden descargar el modelo) a la diócesis a la que pertenece la parroquia donde fueron bautizados. La misiva debe contener datos básicos -parroquia y fecha lo más aproximada posible- y puede ser enviada por correo personal o entregada personalmente, aunque en ambos casos recomiendan siempre pedir una constancia de entrega.
En teoría, cada Arzobispado debe contestar favorablemente en un término de cinco días; sin embargo este plazo no siempre es respetado. Para esto justamente se conformaron los movimientos de Apostasía Colectiva, que además de en La Plata funcionan en Mar del Plata, 9 de Julio, Capital Federal y otras muchas localidades bonaerenses y del país. Luego, el o la apóstata deberá acercarse a la parroquia donde fue bautizado y exigir el trámite de desafiliación.
MÁS DE 300 APÓSTATAS EN LA CIUDAD
Según confiaron desde Apostasía Colectiva La Plata, hay 260 cartas efectivamente presentadas y restan 50 por presentar, un trámite que realizarán este fin de semana. Desde La Revuelta, una agrupación política de la facultad de Trabajo Social (UNLP), también estuvieron llevando adelante trámites de apostasía: según confiaron a este medio, más de 30 personas acercaron sus misivas que serán entregadas este fin de semana en el Arzobispado. Con este número, La Plata se acerca a tener casi un apóstata por día en lo que va del 2018.
La última jornada de Apostasía Colectiva se realizará este domingo 18 de noviembre de 16 a 19 en el Parque Saavedra (12 y 65), y el martes 20 se presentarán las cartas en el Arzobispado. "Pensamos que la fe de cada unx es algo del ámbito personal, que no puede ser utilizado para influenciar y limitar la vida social, por eso te invitamos a desafiliarte de la Iglesia como un paso más por un Estado Laico. Por la separación de la Iglesia y el Estado", advierten en un comunicado desde Apostasía.
Además, en el Parque Saavedra estarán impulsando una campaña para quitar las imágenes religiosas en las dependencias del Estado. Los firmantes solicitarán ser tenidos en cuenta como parte del expediente 799/2018 DGCCL iniciado por la Campaña Nacional por un Estado Laico, en el que solicitan el retiro de la Virgen de Luján colocada en el Salón de Pasos Perdidos del Palacio del Congreso de la Nación por considerar que su presencia "vulnera la debida neutralidad estatal en materia religiosa, creando una diferencia de trato discriminatoria entre les ciudadanxs argentinxs en virtud de sus creencias religiosas".